<p>El detonante fue un informe del departamento federal de trabajo, que muestra un inesperado aumento en las solicitudes de nuevos subsidios por desempleo. Al mismo tiempo, otra fuente (ADR Employer Service) señalaba que el sector privado había eliminado 33.000 puestos laborales en agosto. Pero, ya desde Asia oriental, la jornada venía depresiva.</p>
<p>Como si no fuese bastante, Terex Corporation (equipos para minería y construcción) redujo proyecciones de ventas y utilidades para este año. Su acción cayó casi 20%. En particular, porque la demanda débil desborda EE.UU.-Canadá y afecta Europa occidental. </p>
<p>Otras cotizantes castigadas eran Caterpillar (-5%) y Boeing (-4%). En este caso, porque el sindicato clave para la compañía rechazó la oferta patronal de convenio y votó por ira al paro general.</p>
<p>Pero el trasfondo real suma los signos recesivos en EE.UU. y la Eurozona, pese a las obsesiones inflacionarias de Jean-Claude Trichet, presidente del Banco Central Europeo (iba a subir el tipo básico, pero debió dejarlo en 4,25% anual). A ambos lados del Atlántico, no hay fe en que las tendencias negativas aflojen en un plazo razonable. Poco influyó que los crudos continuasen bajos (US$ 108 el barril en Nueva York, 106,75 en Londres) o el euro tocase un mínimo en casi diez meses (US$ 1,435). Esto lleva en dólar a € 0,696.</p>
<p>En ese contexto, el Dow Jones 30 perdía 3,01%. En tanto, el Standard&Poor’s 50 bajaba 3% y el Nasdaq compuesto se acercaba a –3,2%. Otro factor eran las ventas en agosto que, en el sector automotor, se desplomaron hasta 32% (Chrysler).</p>
Desempleo, recesión y menos crecimiento mundial derrumban los mercados
Las acciones neoyorquinas y londinenses cedían más de 3%, debido a malas señales económicas dentro y fuera de Estados Unidos. Esto puede perjudicar los balances del trimestre, pese a la baja de crudos y euro o el alza del dólar.