<p>Esas tenencias han estado perdiendo valor –por lo menos hasta fin de agosto- mientras en dólar cedía ante el euro o el yuan. Ello subraya la escasa base de capital, apenas US$ 3.200 millones. Muchísimo menos, por ejemplo, que el emisor argentino. El Fondo Monetario Internacional viene advirtiendo reservadamente sobre ese problema, sin resultados.</p>
<p>Ahora el banco centra chino precisa inyecciones de fondos frescos. Naturalmente, siempre es posible emitir moneda, pero a costa de generar inflación. En lugar de ello, la institución discute con el ministerio de hacienda medios de consolidar la base de capital.</p>
<p>Estos aprietos tienen diversas repercusiones. Por un lado, dificultará que el yuan siga avanzando sobre el dólar, máxime con esta divisa en ascenso. Por otro, eso elevará tensiones comerciales son EE.UU. El gobierno saliente y muchos legisladores demócratas vienen presionando para que la moneda china suba, se reduzca la competitividad del gigante y, con ella, mejore la balanza de intercambio norteamericana.</p>
<p>Sin duda, el banco central aboga por un yuan más fuerte. Pero choca constantemente con hacienda, que prefiere una moneda más débil. Cada vez que el yuan afloja, las exportaciones chinas aumentan; no sólo respecto de EE.UU. Cargando las tintas, varios analistas occidentales habla de “una feroz rivalidad” entre ambas instancias y llegan a imaginar que ello deteriorará la independencia del emisor.</p>
<p>Beijing ha sido varias veces advertido sobre sus vastas tenencias de deuda norteamericana. El FMI estima que ello torna el país en vulnerable a dos tipos de pérdidas: por yuan caro o por alza en las tasas estadounidenses (algo que no parece factible en las condiciones actuales). Obviamente, los funcionarios chinos no formulan comentarios al respecto.</p>
<p>Según el Banco de Ajustes Internacionales (BAI, “banco central de bancos centrales”, Basilea), muchos emisores tienen escasas bases de capital en relación con las reservas externas. Pero muy pocas son tan exiguas como la de China.</p>
<p>De por sí y contra lo que sostiene el FMI, las dificultades chinas de por sí solas no amenazan la economía real. El país cuenta con amplios recursos y un importante superávit fiscal. Probablemente, hacienda se limite a transferir al banco central bonos en poder de otras reparticiones, para elevar su capital. En suma, los roces entre la cúpula monetaria y la financiera son exageradas por el FMI o analistas allegados.</p>
<p>Diversas fuentes calculan que las reservas internacional china alcanzarán US$ 1,8 billones a fin de 2008, 56% (un billón) en títulos estadounidenses. Una de las posibilidades que se barajan es emplear parte de esa masa en la compra de portaviones, que suelen costar alrededor de US$ 5.000 millones cada uno, pero ¿como reaccionaría el Pentágono si eso aumentase el poder naval chino en el Pacífico occidental, dominio de la VII flota?</p>
China: el banco central anda con necesidades de capital fresco
La entidad ha estado comprando de todo en Estados Unidos durante siete años, inclusive casi un billón de dólares en bonos de tesorería. Pero también tomó deuda emitida por Fannie Mae y Freddie Mac, las hipotecarias paraestatales hoy en dificultades.