El Foro Internacional de Seguridad y Factores Humanos se celebró el 13 y 14 de noviembre en la Ciudad de México, convocando a expertos internacionales, líderes empresariales y profesionales de seguridad industrial. La jornada buscó marcar un hito en el enfoque preventivo de la seguridad laboral en la región.
Durante el evento, se abordaron herramientas prácticas y enfoques innovadores para integrar los factores humanos en la gestión de la seguridad. Entre los temas centrales figuraron la reducción de errores críticos, el impacto de la neurociencia en el comportamiento seguro y experiencias de transformación en la cultura organizacional.
Marinela Cardona Salazar, una de las expositoras, definió la seguridad como un “Acto de Amor”, y enfatizó la relevancia de la salud mental en la prevención: “Si la persona no está bien emocionalmente va a ser difícil que pueda trabajar sin riesgo a accidentarse”. Por su parte, Larry Wilson, autor y fundador de SafeStart, explicó que “el comportamiento de la otra persona también determina un accidente o lesión, como cruzar un semáforo en rojo o fallos inesperados en equipos industriales”.
Carlos Sánchez expuso el caso de Becton Dickinson, donde la implementación del programa SafeStart fue catalizador de cambio. “Fue un gran reto desarrollar una cultura de seguridad para 4.500 trabajadores”, señaló, subrayando que en 24 meses se logró una disminución de accidentes a partir del compromiso de los empleados.
Otros especialistas, como Nelson Gutiérrez, remarcaron la importancia de comprender el contexto emocional y mental de cada tarea, mientras que Victor Domingo analizó la influencia de la persuasión digital en la promoción de conductas seguras. Cristian Sylvestre detalló la influencia de la neurociencia sobre los hábitos y la conciencia situacional para evitar accidentes. Finalmente, David Bianco sostuvo que “en el mundo de la seguridad hay que esperar lo inesperado y capacitarse para evitar los accidentes”.
