Otra vez, surgen temores acerca de telcos y su solvencia

Por un lado, AT&T Latin America solicita entrar en convocatoria para evitarse más problemas. Por el otro, una agencia calificadora manifiesta públicamente sus temores sobre la solvencia del sector telecomunicaciones.

23 abril, 2003

En un comunicado oficial, ATTL informa que ha convertido una bancarrota “involuntaria” en una solicitud de ampararse en el título XI de la ley federal de quiebras y concursos. Técnicamente, hace una semana que la firma está en el marco del título IX, o sea en una convocatoria “forzosa”, pedida por un acreedor, la firma Matlin Patterson.

Si el tribunal de quiebra de Miami, donde se había radicado la demanda “hostil”, aprueba, ATTL ingresará a concurso en condiciones más favorables. En el mismo comunicado, la empresa revela que estima, para el primer trimestre, US$ 39 millones de renta neta, contra 44,2 millones un año atrás. Ambas cifras son por demás exiguas.

Justamente ese tipo de números y la situación económica del negocio han impulsado a Standard & Poor’s a difundir un documento interno sobre la industria de las telecomunicaciones (es decir, servicios, redes y equipos). “Las deudas acumuladas por las empresas, tanto en Estados Unidos como en la Unión Europea, probablemente generen nuevas bancarrotas”, cita textualmente un resumen del trabajo, que sale hoy en un medio neoyorquino y otro londinense. De acuerdo con proyecciones de S&P, a fines de 2002 la exposición financiera del sector ascendía a unos US$ 306.000 millones (casi tres veces la quiebra de WorldCom).

En un comunicado oficial, ATTL informa que ha convertido una bancarrota “involuntaria” en una solicitud de ampararse en el título XI de la ley federal de quiebras y concursos. Técnicamente, hace una semana que la firma está en el marco del título IX, o sea en una convocatoria “forzosa”, pedida por un acreedor, la firma Matlin Patterson.

Si el tribunal de quiebra de Miami, donde se había radicado la demanda “hostil”, aprueba, ATTL ingresará a concurso en condiciones más favorables. En el mismo comunicado, la empresa revela que estima, para el primer trimestre, US$ 39 millones de renta neta, contra 44,2 millones un año atrás. Ambas cifras son por demás exiguas.

Justamente ese tipo de números y la situación económica del negocio han impulsado a Standard & Poor’s a difundir un documento interno sobre la industria de las telecomunicaciones (es decir, servicios, redes y equipos). “Las deudas acumuladas por las empresas, tanto en Estados Unidos como en la Unión Europea, probablemente generen nuevas bancarrotas”, cita textualmente un resumen del trabajo, que sale hoy en un medio neoyorquino y otro londinense. De acuerdo con proyecciones de S&P, a fines de 2002 la exposición financiera del sector ascendía a unos US$ 306.000 millones (casi tres veces la quiebra de WorldCom).

Compartir:
Notas Relacionadas

Suscripción Digital

Suscríbase a Mercado y reciba todos los meses la mas completa información sobre Economía, Negocios, Tecnología, Managment y más.

Suscribirse Archivo Ver todos los planes

Newsletter


Reciba todas las novedades de la Revista Mercado en su email.

Reciba todas las novedades