Minoristas: más que pasos, tienen que dar saltos

Hace muy poco tiempo era relativamente escasa la gente que compraba online. Pero en el lapso de muy pocos meses muchas personas cambiaron sus hábitos para sorpresa de los comercios. Y se han adaptado muy bien a la compra online. Esa es una tendencia que probablemente se mantenga una vez superada la crisis de la pandemia.

Ha llegado la hora, entonces, de reconfigurar los negocios minoristas. La investigación realizada por Oz Ozturk e Ian Khan para PwC señala cinco maneras de comenzar esa tarea.

Buscar la menor oscilación de precios posible. Los compradores van a reconocer y confiar en las empresas que muestren que hacen lo imposible para mantener los precios bajos.

Ayudar a los compradores a sentirse seguros. Los clientes van a elegir experiencias que refuercen la seguridad. Habrá entonces que hacer públicos los protocolos de limpieza, mostrar personal con tapabocas e implementar el distanciamiento social dentro de sus locales.

Reforzar la venta digital. La investigación de PwC muestra que el movimiento sostenido hacia la compra electrónica se aceleró de pronto. Antes de la pandemia solo 9% de los consumidores compraba sus verduras online. Ahora 35% compra alimentos online o por teléfono y 63% de esos consumidores están comprando más productos online que antes del distanciamiento social.

Tratar de fusionar la experiencia física y digital. Los consumidores siguen apreciando el valor del lugar físico y la experiencia social que ofrece un comercio. Aunque los canales digitales ahora ofrecen la posibilidad del distanciamiento social y la conveniencia, la interacción humana sigue siendo importante, especialmente para explicar productos o servicios o encontrar soluciones.

Dar prioridad a lo que los clientes dicen que les importa. Especialmente cuando son intangibles, como transparencia, sustentabilidad, limpieza y conciencia social.