Flamante fusión trabaja en nueva promesa contra la obesidad

Sanofi-Aventis, el grupo resultante de la fusión de ambos laboratorios franceses, acaba de comprobar que la droga actualmente en período de prueba ha demostrado ser eficaz en el testeo clínico más amplio hasta la fecha.

31 agosto, 2004

El 29 de agosto subieron las acciones de la flamante fusión Sanofi-Aventis
en cuanto el nuevo grupo farmacéutico reveló que la nueva droga
que está desarrollando demostró eficacia en la más amplia
prueba clínica hasta la fecha.
Los obesos a los que se les administró la droga-denominada Rimonabant
– bajaron un promedio de 8,6kg en un año y redujeron 8,5cm de cintura.

Los resultados de las pruebas en fase III, que conforman la última etapa
de pruebas de la compañía antes que tramitar la aprobación
oficial para salir al mercado, fueron anunciados en el congreso anual de la
sociedad europea de Cardiología en Munich, Alemania. Luego del anuncio,
las acciones de Sanofi en París subieron 1% a €59.15.

Rimonabant ataca dos de las principales causas de mortalidad en el mundo occidental,
obesidad y tabaquismo. La investigación utilizó como punto de
partida los síntomas de hambre de provoca el cannabis y que permitieron
a Sanofi identificar los receptores cerebrales que controlan el apetito.

Sanofi, que espera conseguir la aprobación para la droga el año
próximo antes de su lanzamiento en 2006 con el nombre de Acomplia, cree
que puede convertirse en uno de sus productos de más venta en el mundo.
Los analistas calculan ventas anuales entre US$ 3.600 y 6.000 millones.

La prueba demostró que los efectos secundarios, que algunos analistas
temían podrían incluir mayor sensibilidad al dolor, fueron relativamente
menores, siendo los más comunes diarrea y náuseas. Los tests continuarán
hasta el año próximo con el objetivo de averiguar si la pérdida
de peso se mantiene. En realidad todo el proceso incluye siete pruebas separadas:
cuatro para obesidad y tres para tabaquismo. Hasta ahora todas han mostrado
resultados positivos. En la prueba de tabaquismo, los pacientes que dejaron
el hábito no aumentaron de peso como suele ocurrir. Además, evidencian
un gran aumento en el llamado colesterol bueno.

La obesidad como negocio

Está cada vez más comprobado que el control de la obesidad implica
mucho más que un esfuerzo de voluntad. Dieta y ejercicio son muy buenos
cuando la persona no ha llegado todavía a ser obesa. Cuando eso ocurre
se vuelve muy difícil eliminar la grasa.

Con más de 1.000.000 millones de personas con sobrepeso en el mundo y
más de 300 millones de obesos, desarrollar una pastilla que verdaderamente
pueda convertirlos en personas más delgadas tiene un evidente atractivo
comercial. La nueva fusión Sanofi-Aventis, al suprimir el apetito, parece
ser hasta ahora la que más posibilidades tiene de aprovechar ese mercado
masivo.

Hay muchas más pruebas por delante. ¿Se pueden manejar los efectos
secundarios? ¿Podrán los usuarios mantener gran parte de la pérdida
de peso durante un año luego de que dejan de tomar la droga? Lo ultimo
que quieren los trabajadores de la salud es una pastilla que la gente deba tomar
por el resto de su vida.
Pero el potencial es claro. Suponiendo un costo de US$ 3,5 por día, las
ventas globales de Rimonobant n llegar a US$ 1.200 millones en 2013 sólo
en Estados Unidos, según Lehman Brothers.

 

El 29 de agosto subieron las acciones de la flamante fusión Sanofi-Aventis
en cuanto el nuevo grupo farmacéutico reveló que la nueva droga
que está desarrollando demostró eficacia en la más amplia
prueba clínica hasta la fecha.
Los obesos a los que se les administró la droga-denominada Rimonabant
– bajaron un promedio de 8,6kg en un año y redujeron 8,5cm de cintura.

Los resultados de las pruebas en fase III, que conforman la última etapa
de pruebas de la compañía antes que tramitar la aprobación
oficial para salir al mercado, fueron anunciados en el congreso anual de la
sociedad europea de Cardiología en Munich, Alemania. Luego del anuncio,
las acciones de Sanofi en París subieron 1% a €59.15.

Rimonabant ataca dos de las principales causas de mortalidad en el mundo occidental,
obesidad y tabaquismo. La investigación utilizó como punto de
partida los síntomas de hambre de provoca el cannabis y que permitieron
a Sanofi identificar los receptores cerebrales que controlan el apetito.

Sanofi, que espera conseguir la aprobación para la droga el año
próximo antes de su lanzamiento en 2006 con el nombre de Acomplia, cree
que puede convertirse en uno de sus productos de más venta en el mundo.
Los analistas calculan ventas anuales entre US$ 3.600 y 6.000 millones.

La prueba demostró que los efectos secundarios, que algunos analistas
temían podrían incluir mayor sensibilidad al dolor, fueron relativamente
menores, siendo los más comunes diarrea y náuseas. Los tests continuarán
hasta el año próximo con el objetivo de averiguar si la pérdida
de peso se mantiene. En realidad todo el proceso incluye siete pruebas separadas:
cuatro para obesidad y tres para tabaquismo. Hasta ahora todas han mostrado
resultados positivos. En la prueba de tabaquismo, los pacientes que dejaron
el hábito no aumentaron de peso como suele ocurrir. Además, evidencian
un gran aumento en el llamado colesterol bueno.

La obesidad como negocio

Está cada vez más comprobado que el control de la obesidad implica
mucho más que un esfuerzo de voluntad. Dieta y ejercicio son muy buenos
cuando la persona no ha llegado todavía a ser obesa. Cuando eso ocurre
se vuelve muy difícil eliminar la grasa.

Con más de 1.000.000 millones de personas con sobrepeso en el mundo y
más de 300 millones de obesos, desarrollar una pastilla que verdaderamente
pueda convertirlos en personas más delgadas tiene un evidente atractivo
comercial. La nueva fusión Sanofi-Aventis, al suprimir el apetito, parece
ser hasta ahora la que más posibilidades tiene de aprovechar ese mercado
masivo.

Hay muchas más pruebas por delante. ¿Se pueden manejar los efectos
secundarios? ¿Podrán los usuarios mantener gran parte de la pérdida
de peso durante un año luego de que dejan de tomar la droga? Lo ultimo
que quieren los trabajadores de la salud es una pastilla que la gente deba tomar
por el resto de su vida.
Pero el potencial es claro. Suponiendo un costo de US$ 3,5 por día, las
ventas globales de Rimonobant n llegar a US$ 1.200 millones en 2013 sólo
en Estados Unidos, según Lehman Brothers.

 

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