Finalmente, Repsol admite que busca socio privado para YPF

Lo reconoció el presidente ejecutivo del grupo español, Antoni Brufáu. Tras desmentirlo otras veces, el catalán considera que sería bueno para el crecimiento de la compañía. Pero no cederá el control de la ex Yacimientos petrolíferos fiscales.

9 mayo, 2007

Brufáu aclaró en varias oportunidades, durante sus declaraciones desde Madrid, que la eventual entrada de otro socio no significará que Repsol ceda el control de YPF. “Hay buenos grupos empresarios”, se limitó a responder al ser consultado sobre a quién podría elegir la empresa. El ejecutivo hablaba con los medios poco antes de la asamblea ordinaria de accionistas.

La subsidiaria argentina de la petrolera, la ex estatal YPF, ha sido centro de versiones durante el último año. Una de las especies –fogoneada por la prensa porteña- indicaba que el gobierno de Néstor Kirchner quería reestatizarla. Eso fue desmentido por la Casa Rosada.

“Me parece que tener en Argentina eventuales socios privados, que respondiesen a la filosofía de negocios de Repsol sería bueno”. A juicio de Brufáu, eso ayudaría al proceso de crecimiento y la mejora de rentabilidad. “En ningún caso –reiteró- contemplamos perder la mayoría en YPF”.

La petrolera, según la prensa española, baraja dos alternativas. Una consiste en incorporar un socio privado argentino. La otra sería sacar a bolsa un porcentaje de YPF, que no superaría 25% del capital social, para atraer inversores argentinos. En 2006, Repsol YPF estudió la posibilidad de cotizar un porcentaje de YPF, pero luego dejó congelado el proyecto.

Sobre rumores relativos a un presunto interés de comprar Repsol YPF misma, por parte del italiano Ente nazionale idrocarburi (ENI), Brufáu respondió: “en el sur de Europa occidental hay poco petróleo. No tiene sentido una compañía regional. No creo en conglomerados por proximidad, sino en la expansión en entornos como Brasil o Argentina, donde sí existen recursos petroleros”.

.

El CEO no pudo evitar referirse a las últimas fusiones y adquisiciones en los sectores de energía y combustibles. Específicamente, casos como Endesa, Gas Natural, E.On o Ente nazionale elettricità (ENEL). Aun aceptando que, entre los objetivos inmediatos de Repsol, se encuentra estrechar lazos con Gas Natural (donde tiene más de 30%), Brufáu apuntó que no hay en perspectiva fusión alguna.

Brufáu aclaró en varias oportunidades, durante sus declaraciones desde Madrid, que la eventual entrada de otro socio no significará que Repsol ceda el control de YPF. “Hay buenos grupos empresarios”, se limitó a responder al ser consultado sobre a quién podría elegir la empresa. El ejecutivo hablaba con los medios poco antes de la asamblea ordinaria de accionistas.

La subsidiaria argentina de la petrolera, la ex estatal YPF, ha sido centro de versiones durante el último año. Una de las especies –fogoneada por la prensa porteña- indicaba que el gobierno de Néstor Kirchner quería reestatizarla. Eso fue desmentido por la Casa Rosada.

“Me parece que tener en Argentina eventuales socios privados, que respondiesen a la filosofía de negocios de Repsol sería bueno”. A juicio de Brufáu, eso ayudaría al proceso de crecimiento y la mejora de rentabilidad. “En ningún caso –reiteró- contemplamos perder la mayoría en YPF”.

La petrolera, según la prensa española, baraja dos alternativas. Una consiste en incorporar un socio privado argentino. La otra sería sacar a bolsa un porcentaje de YPF, que no superaría 25% del capital social, para atraer inversores argentinos. En 2006, Repsol YPF estudió la posibilidad de cotizar un porcentaje de YPF, pero luego dejó congelado el proyecto.

Sobre rumores relativos a un presunto interés de comprar Repsol YPF misma, por parte del italiano Ente nazionale idrocarburi (ENI), Brufáu respondió: “en el sur de Europa occidental hay poco petróleo. No tiene sentido una compañía regional. No creo en conglomerados por proximidad, sino en la expansión en entornos como Brasil o Argentina, donde sí existen recursos petroleros”.

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El CEO no pudo evitar referirse a las últimas fusiones y adquisiciones en los sectores de energía y combustibles. Específicamente, casos como Endesa, Gas Natural, E.On o Ente nazionale elettricità (ENEL). Aun aceptando que, entre los objetivos inmediatos de Repsol, se encuentra estrechar lazos con Gas Natural (donde tiene más de 30%), Brufáu apuntó que no hay en perspectiva fusión alguna.

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