BP premia a Hayward pero Italia la cuestiona en Libia
Anthony Hayward se va con una recompensa millonaria, gestionada por Karl-Erik Svanberg, su superior, pese a los US$ 25.000 millones que costaron sus errores. Mientras, Italia se inquieta por pozos de BP en Sirte, a corta distancia de sus costas.
<p>Ello pese a que el director ejecutivo saliente sea responsable de gastos de salvamentos próximos a los US$ 5.000 millones y 20.000 millones impuestos por Barack Obama para solventar la recuperación ecológica, ambiental y económica de la zona. Sin embargo, los costos de Hayward también incluyen el bloqueo final del pozo, previsto para esta quincena.<br />
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Como sostiene el gobierno de Luisiana y lo admite en forma reservada su sucesor Robert Dudley, Hayward “debiera ser llevado a la justicia por negligencia, torpeza e indiferencia social ante las consecuencia humanas y naturales de la catástrofe”. Pero la falta de legislación internacional, como en el Mediterráneo, no permite sancionar a empresas y sus ejecutivos. <br />
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<p>En efecto, British Petroleum se apresta a ejecutar cinco perforaciones tipo Macondo en el lecho del gran Sirte, golfo al norte de Libia. Vale decir, unos 600 kilómetros del extremo sudeste de Sicilia. Por de pronto, Stefania Prestigiacomo –ministra de ambiente- ha intervenido con firmeza replanteando una propuesta poco grata a Trípoli y Londres: suspender el proyecto.<br />
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Su objetivo es dar tiempo a que los veintiún estados ribereños del Mediterráneo “lleguen a posturas comunes para manejar esta clase de amenazas”. Después de todo, se trata de un mar cerrado, donde un derrame similar al de la plataforma Deepwater Horizon podría tener efectos mucho peores que en una cuenca abierta como el golfo de México.<br />
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Las distancias son alarmantes. Amén del sudeste siciliano (600 Km), corren peligro Lampedusa (590 Km), Malta (515 Km), Túnez (igual) y Pantelleria (750 km). Inesperadadamente, el canciller Franco Fratini se apartó un momento de la interminable crisis del gobierno italiano para apoyar a Prestigiacomo.<br />
Por el contrario, Abdulhafed Gaddur –embajador libio en Roma- asegura que “nadie puede enseñarnos. <br />
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Desde hace 45 años sabemos cómo proceder en la materia y no precisamos consejos”. Más que las palabras del diplomático, pesa un dato real: Ente Nazionale Idrocarburi opera una plataforma en el-Burí, otra área del Sirte.<br />
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El otro problema de BP se lo buscó la propia empresa, ya presionada por sus concesionarios norteamericanos para volver a llamarse Amoco. Se trata de un sueco generoso, Svanberg, un magnate telefónico que encabeza la junta de la petrolera. A sus instancias se regala a Hayward una indemnización más pensión vitalicia de varios millones.<br />
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