Aerolíneas aun sin solución
Un grupo de trabajadores intentó detener la salida de un vuelo de Iberia en el marco de los reclamos por los sueldos atrasados. En la Sepi esperan por el dinero que prometió el Gobierno.
Casi un centenar de trabajadores de Aerolíneas Argentinas retrasaron esta tarde (jueves 24) el despegue de un avión de la empresa española Iberia, en el aeropuerto internacional de Ezeiza, en medio de airados reclamos para que la línea de bandera controlada por la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (Sepi) española pague los sueldos del mes de abril.
El avión, que debió partir a las 14.15, fue detenido por un grupo de trabajadores que lo rodeó con una bandera argentina de más de 100 metros de largo.
La nave, un 747 lleno de pasajeros, no pudo moverse mientras que personal de la policía aeronáutica intentaba que los manifestantes cejen en su intento de evitar el despegue del avión.
Esta mañana, la prensa argentina se hizo eco hoy (jueves 24) de una conversación entre el ministro de Economía, Domingo Cavallo, y el jefe de Gabinete, Chrystian Colombo, en el que ambos se referían a un incumplimiento contractual de parte del Estado argentino contra la Aerolínea.
Aerolíneas Argentinas está operada por su principal accionista, la Sepi, que tiene 91,2% de las acciones, mientras que el Estado argentino conserva 5,4% de los títulos.
“Yo no sabía que habíamos asumido una serie de compromisos que no los estábamos cumpliendo”, le dijo Cavallo a Colombo, en un acto oficial celebrado ayer, miércoles, en la Casa de Gobierno y sin percatarse de que los micrófonos estaban reproduciendo la charla.
Casi un centenar de trabajadores de Aerolíneas Argentinas retrasaron esta tarde (jueves 24) el despegue de un avión de la empresa española Iberia, en el aeropuerto internacional de Ezeiza, en medio de airados reclamos para que la línea de bandera controlada por la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (Sepi) española pague los sueldos del mes de abril.
El avión, que debió partir a las 14.15, fue detenido por un grupo de trabajadores que lo rodeó con una bandera argentina de más de 100 metros de largo.
La nave, un 747 lleno de pasajeros, no pudo moverse mientras que personal de la policía aeronáutica intentaba que los manifestantes cejen en su intento de evitar el despegue del avión.
Esta mañana, la prensa argentina se hizo eco hoy (jueves 24) de una conversación entre el ministro de Economía, Domingo Cavallo, y el jefe de Gabinete, Chrystian Colombo, en el que ambos se referían a un incumplimiento contractual de parte del Estado argentino contra la Aerolínea.
Aerolíneas Argentinas está operada por su principal accionista, la Sepi, que tiene 91,2% de las acciones, mientras que el Estado argentino conserva 5,4% de los títulos.
“Yo no sabía que habíamos asumido una serie de compromisos que no los estábamos cumpliendo”, le dijo Cavallo a Colombo, en un acto oficial celebrado ayer, miércoles, en la Casa de Gobierno y sin percatarse de que los micrófonos estaban reproduciendo la charla.
