(NA). – Las empresas pesqueras volverán a cobrar reembolsos por las exportaciones realizadas desde los puertos de la Patagonia, que habían sido eliminados en 1996, si el
presidente Fernando de la Rúa firma el decreto reglamentario de la ley que autoriza el retorno de esos subsidios.
Esta medida provocaría un costo fiscal de US$ 76 millones anuales, de acuerdo con estimaciones extraoficiales.
La norma legal fue propuesta por el frepasista santacruceño Rafael Flores, y el 8 de agosto pasado obtuvo la aprobación del Congreso.
De este modo, las firmas pesqueras, que en su mayoría son de capital extranjero, cobrarán reembolsos de entre 7 y 12% por el monto de las ventas que realicen al exterior, una medida similar a la que beneficia a otros dos productos patagónicos: las lanas y los minerales.
Estos reembolsos habían sido anulados por el ex ministro de Economía Roque Fernández en 1996, con el argumento de que ese beneficio no correspondía a quienes elaboraran sus productos en alta mar, sino a los que procesaran su captura en tierra.
De este modo, quedaron excluidos del subsidio unos 300 buques congeladores, que están equipados para procesar a bordo lo que pescan, según publicó un matutino porteño.
Esa flota obtiene mayoritariamente calamar, langostino y merluza, y mueve US$ 850 millones anuales por exportaciones.
(NA). – Las empresas pesqueras volverán a cobrar reembolsos por las exportaciones realizadas desde los puertos de la Patagonia, que habían sido eliminados en 1996, si el
presidente Fernando de la Rúa firma el decreto reglamentario de la ley que autoriza el retorno de esos subsidios.
Esta medida provocaría un costo fiscal de US$ 76 millones anuales, de acuerdo con estimaciones extraoficiales.
La norma legal fue propuesta por el frepasista santacruceño Rafael Flores, y el 8 de agosto pasado obtuvo la aprobación del Congreso.
De este modo, las firmas pesqueras, que en su mayoría son de capital extranjero, cobrarán reembolsos de entre 7 y 12% por el monto de las ventas que realicen al exterior, una medida similar a la que beneficia a otros dos productos patagónicos: las lanas y los minerales.
Estos reembolsos habían sido anulados por el ex ministro de Economía Roque Fernández en 1996, con el argumento de que ese beneficio no correspondía a quienes elaboraran sus productos en alta mar, sino a los que procesaran su captura en tierra.
De este modo, quedaron excluidos del subsidio unos 300 buques congeladores, que están equipados para procesar a bordo lo que pescan, según publicó un matutino porteño.
Esa flota obtiene mayoritariamente calamar, langostino y merluza, y mueve US$ 850 millones anuales por exportaciones.