Reducción de 9% en gasto público
En lo que va del 2000 se registró una reducción del gasto público de 9%. Se planea otro recorte aproximadamente, $ 600 millones. Alvarez pide ley que limite el gasto de las legislaturas.
En el primer cuatrimestre del año, el gasto público se redujo en $ 509 millones, lo que equivale a 9% respecto a igual período del año anterior. Estas cifras fueron dadas a conocer durante el fin de semana, por el secretario de Hacienda de la Nación, Mario Vicens, y el subsecretario de Presupuesto, Nicolás Gadano.
Los principales organismos afectados hasta el momento, fueron:
Presidencia de la Nación, con un recorte de US$ 105 millones.
Ministerio del Interior, US$ 120 millones.
Ministerio de Economía, US$ 90 millones.
Una parte importante de estos ajustes se logró actuando sobre los gastos de personal; entre octubre de 1999 y marzo del 2000, se habrían cancelado 5.148 contratos.
El único ministerio que exhibe un incremento importante de gastos fue el de Educación, como consecuencia del pago del Fondo de Incentivo Docente, que sumó en total US$ 310 millones. De todas formas, el ministro de Educación –Juan José Llach– anunció que se dispondrán reducciones en el plantel de su cartera y la que se planean, también, reestructuraciones programáticas, con plazos y objetivos por área que serán evaluados sistemáticamente. La remuneración del personal estará ligada a los resultados que se obtengan en cada programa.
Por su parte, el vicepresidente Carlos Alvarez, anunció que se prevé la reducción de otros $ 600 millones en los gastos del Estado y señaló como una necesidad que el Congreso apruebe una ley marco para que las legislaturas gasten 1,5% ó 2% del presupuesto.
Cabe destacar que cuando Fernando de la Rúa asumió el gobierno se encontró con un elevado y creciente déficit fiscal, un sostenido aumento del gasto y una creciente restricción de los ingresos. De acuerdo a los cifras que dio a conocer el gobierno, 1999 cerró con un déficit de $9.300 millones, casi el doble que las metas anunciadas a comienzos de ese año. Para el 2000 se proyectaba un déficit cercano a los $11000 millones, lo que afectaría seriamente la solvencia del sector público y destruiría cualquier esperanza de recuperación de la producción y el empleo.
El gobierno intenta desactivar la bomba fiscal. A pesar de que el déficit registrado en el primer trimestre es muy alto, cayó más de 30% comparado con el último de 1999. Una parte importante de esta reducción proviene del gasto público.
Mario Vicens, secretario de Hacienda, señaló que :”es necesario avanzar hasta alcanzar el equilibrio que impone la ley de responsabilidad fiscal” para lograr que el país crezca impulsado por la inversión y el aumento de la productividad.
En el primer cuatrimestre del año, el gasto público se redujo en $ 509 millones, lo que equivale a 9% respecto a igual período del año anterior. Estas cifras fueron dadas a conocer durante el fin de semana, por el secretario de Hacienda de la Nación, Mario Vicens, y el subsecretario de Presupuesto, Nicolás Gadano.
Los principales organismos afectados hasta el momento, fueron:
Presidencia de la Nación, con un recorte de US$ 105 millones.
Ministerio del Interior, US$ 120 millones.
Ministerio de Economía, US$ 90 millones.
Una parte importante de estos ajustes se logró actuando sobre los gastos de personal; entre octubre de 1999 y marzo del 2000, se habrían cancelado 5.148 contratos.
El único ministerio que exhibe un incremento importante de gastos fue el de Educación, como consecuencia del pago del Fondo de Incentivo Docente, que sumó en total US$ 310 millones. De todas formas, el ministro de Educación –Juan José Llach– anunció que se dispondrán reducciones en el plantel de su cartera y la que se planean, también, reestructuraciones programáticas, con plazos y objetivos por área que serán evaluados sistemáticamente. La remuneración del personal estará ligada a los resultados que se obtengan en cada programa.
Por su parte, el vicepresidente Carlos Alvarez, anunció que se prevé la reducción de otros $ 600 millones en los gastos del Estado y señaló como una necesidad que el Congreso apruebe una ley marco para que las legislaturas gasten 1,5% ó 2% del presupuesto.
Cabe destacar que cuando Fernando de la Rúa asumió el gobierno se encontró con un elevado y creciente déficit fiscal, un sostenido aumento del gasto y una creciente restricción de los ingresos. De acuerdo a los cifras que dio a conocer el gobierno, 1999 cerró con un déficit de $9.300 millones, casi el doble que las metas anunciadas a comienzos de ese año. Para el 2000 se proyectaba un déficit cercano a los $11000 millones, lo que afectaría seriamente la solvencia del sector público y destruiría cualquier esperanza de recuperación de la producción y el empleo.
El gobierno intenta desactivar la bomba fiscal. A pesar de que el déficit registrado en el primer trimestre es muy alto, cayó más de 30% comparado con el último de 1999. Una parte importante de esta reducción proviene del gasto público.
Mario Vicens, secretario de Hacienda, señaló que :”es necesario avanzar hasta alcanzar el equilibrio que impone la ley de responsabilidad fiscal” para lograr que el país crezca impulsado por la inversión y el aumento de la productividad.
