(DyN) – Las provincias se pusieron hoy (miércoles 18) en pie de guerra contra el proyecto de presupuesto para el 2001 elaborado por el Poder Ejecutivo, y sus representantes en el Parlamento aseguraron que no lo votarán si se insiste con los recortes a los subsidios contemplados en la constitución Nacional.
El Gobierno pareció acusar recibo y el ministro de Economía, José Luis Machinea, accedió a “escuchar alternativas” para evitar la eliminación de subsidios, aunque lo condicionó a mantener el techo de $ 4.100 millones de déficit.
El bloque de diputados de partidos provinciales adelantó que no votará favorablemente el proyecto si no se suprimen los recortes a los estímulos a ciertas actividades económicas regionales.
Asimismo, los gobernadores justicialistas también manifestaron su desacuerdo en aprobar la ley de gastos y recursos para el año que viene, con la reducción de subvenciones a las naftas y el gasoil en la Patagonia, al Fondo del Tabaco, al Fondo Nacional de la Vivienda (Fonavi), y a algunos programas sociales.
Por su parte, el Gobierno no rechazó de plano la postura de los legisladores y los jefes de Estado, sino que salió a decir que escuchará propuestas siempre y cuando no se modifique el déficit pautado según la Ley de Responsabilidad Fiscal, y se precise de dónde sacar los recursos alternativos al recorte de $ 700 millones establecido en el presupuesto.
(DyN) – Las provincias se pusieron hoy (miércoles 18) en pie de guerra contra el proyecto de presupuesto para el 2001 elaborado por el Poder Ejecutivo, y sus representantes en el Parlamento aseguraron que no lo votarán si se insiste con los recortes a los subsidios contemplados en la constitución Nacional.
El Gobierno pareció acusar recibo y el ministro de Economía, José Luis Machinea, accedió a “escuchar alternativas” para evitar la eliminación de subsidios, aunque lo condicionó a mantener el techo de $ 4.100 millones de déficit.
El bloque de diputados de partidos provinciales adelantó que no votará favorablemente el proyecto si no se suprimen los recortes a los estímulos a ciertas actividades económicas regionales.
Asimismo, los gobernadores justicialistas también manifestaron su desacuerdo en aprobar la ley de gastos y recursos para el año que viene, con la reducción de subvenciones a las naftas y el gasoil en la Patagonia, al Fondo del Tabaco, al Fondo Nacional de la Vivienda (Fonavi), y a algunos programas sociales.
Por su parte, el Gobierno no rechazó de plano la postura de los legisladores y los jefes de Estado, sino que salió a decir que escuchará propuestas siempre y cuando no se modifique el déficit pautado según la Ley de Responsabilidad Fiscal, y se precise de dónde sacar los recursos alternativos al recorte de $ 700 millones establecido en el presupuesto.