Preocupación por las inundaciones
Aseguran que son las más graves de los últimos 50 años en la provincia de Buenos Aires. Las pérdidas ascenderían a $ 700 millones. Se creará un fondo para atender obras hidráulicas por hasta $ 200 millones.
(NA). – El vicegobernador bonaerense, Felipe Solá, consideró esta mañana (jueves 25) que las inundaciones que afectan a un importante sector de la pampa húmeda son “las más graves de los últimos 50 años”, y calificó de “absurda” a la actitud de algunos argentinos que “frente a las catástrofes naturales salen a buscar culpables”.
Las fuertes lluvias, que superaron el promedio anual, provocaron el anegamiento de cuatro millones de hectáreas en la zona noroeste de la provincia de Buenos Aires.
Esto se debe a que “las napas están a flor de la superficie”, explicó Solá. “Entones, hasta las lluvias más livianas rebotan y constituyen enseguida un pequeño curso de agua”, señaló el vicegobernador bonaerense.
En declaraciones a Canal 7, el vicegobernador se quejó y calificó de “absurdo que frente a las catástrofes naturales, todos los argentinos salgan a buscar culpables”. No obstante, aseguró que “el Gobierno nacional entiende el problema y por eso considero que vamos a avanzar”. “El problema principal lo tienen los productores y por lo tanto la economía de toda la región”, señaló.
El ministro de Agricultura bonaerense, Eduardo Althabe, estimó días atrás que las pérdidas causadas por el agua ascienden a unos $ 700 millones. En ese marco, las localidades que tienen problemas más serios son las de Roque Pérez y Monte.
Sobre 33 millones de hectáreas que tiene la provincia, 22 millones mandan el agua que reciben del cielo a un solo lugar: el último tramo del río Salado, desde Roque Pérez a la Bahía de Samborombóm.
“El plan maestro del río Salado es complejísimo, pues con él se determina cómo manejar el agua en una cuenca que no tiene pendiente. Ese plan tardó dos años en elaborarse, durante la gestión del ex gobernador Eduardo Duhalde”, indicó Solá.
Se trata de una iniciativa que prevé la construcción de cinco grandes canales, a un costo de entre $ 1.500 y 1.800 millones. “Este plan es lo que pide la provincia dentro del Plan Nacional de Infraestructura, que nunca arrancó”, se quejó el funcionario bonaerense.
El ministro de Infraestructura, Carlos Bastos, anticipó ayer en Casa de Gobierno que creará un fondo específico para atender obras hidráulicas por un monto de entre $ 150 y 200 millones, cuyos fondos saldrán de la reasignación correspondiente a los 5 centavos gravados en el gas-oil.
(NA). – El vicegobernador bonaerense, Felipe Solá, consideró esta mañana (jueves 25) que las inundaciones que afectan a un importante sector de la pampa húmeda son “las más graves de los últimos 50 años”, y calificó de “absurda” a la actitud de algunos argentinos que “frente a las catástrofes naturales salen a buscar culpables”.
Las fuertes lluvias, que superaron el promedio anual, provocaron el anegamiento de cuatro millones de hectáreas en la zona noroeste de la provincia de Buenos Aires.
Esto se debe a que “las napas están a flor de la superficie”, explicó Solá. “Entones, hasta las lluvias más livianas rebotan y constituyen enseguida un pequeño curso de agua”, señaló el vicegobernador bonaerense.
En declaraciones a Canal 7, el vicegobernador se quejó y calificó de “absurdo que frente a las catástrofes naturales, todos los argentinos salgan a buscar culpables”. No obstante, aseguró que “el Gobierno nacional entiende el problema y por eso considero que vamos a avanzar”. “El problema principal lo tienen los productores y por lo tanto la economía de toda la región”, señaló.
El ministro de Agricultura bonaerense, Eduardo Althabe, estimó días atrás que las pérdidas causadas por el agua ascienden a unos $ 700 millones. En ese marco, las localidades que tienen problemas más serios son las de Roque Pérez y Monte.
Sobre 33 millones de hectáreas que tiene la provincia, 22 millones mandan el agua que reciben del cielo a un solo lugar: el último tramo del río Salado, desde Roque Pérez a la Bahía de Samborombóm.
“El plan maestro del río Salado es complejísimo, pues con él se determina cómo manejar el agua en una cuenca que no tiene pendiente. Ese plan tardó dos años en elaborarse, durante la gestión del ex gobernador Eduardo Duhalde”, indicó Solá.
Se trata de una iniciativa que prevé la construcción de cinco grandes canales, a un costo de entre $ 1.500 y 1.800 millones. “Este plan es lo que pide la provincia dentro del Plan Nacional de Infraestructura, que nunca arrancó”, se quejó el funcionario bonaerense.
El ministro de Infraestructura, Carlos Bastos, anticipó ayer en Casa de Gobierno que creará un fondo específico para atender obras hidráulicas por un monto de entre $ 150 y 200 millones, cuyos fondos saldrán de la reasignación correspondiente a los 5 centavos gravados en el gas-oil.
