En un entrevista concedida al diario La Nación, el jefe del Gabinete Nacional, Chrystian Colombo admitió que hubo una medida de fuerza importante pero instó a preguntarse si la metodología “fue la adecuada, ya que los problemas –dijo- no se van a solucionar con el paro”.
Según explicó Colombo, el gobierno de Fernando De la Rúa está llevando adelante las reformas que hacen falta para que la economía argentina crezca, y aclaró que el primer mandatario es conciente de los costos políticos que conlleva ese camino.
Colombo señaló que la pérdida de popularidad y la falta de consenso social son parte de esos costos, pero advirtió que ni el presidente ni su gabinete están pensando en recuperar popularidad o ganar un voto sino en resolver objetivamente los problemas que aquejan al país.
Consultado acerca de si el grado de conflictividad social aumentará durante los meses de verano, Colombo admitió no tener una idea clara al respecto, aunque si admitió que tal como están las cosas “no habrán vacaciones” para él, ni para ningún integrante del Gobierno.
El funcionario también comentó con respecto a si el alto acatamiento del paro refleja el descontento de la gente que “hay que preguntarse si la metodología de un paro, planteado al principio con intimidación y violencia, es una forma de solucionar los problemas”.
“Y aunque no hubo violencia –continúo- hubo intimidación y fueron detenidos in fraganti delegados de UTA cuando tiraban miguelitos, y hay colectivos quemados”.
Para Colombo “en una sociedad que lleva más de cinco años con un porcentaje de desempleo superior a 13%, que ha dejado de lado una cantidad muy grande de gente, está claro que hay un grado de descontento grande. Es innegable y, como esto perdura desde hace muchos años, la gente está más cansada. Pero hay que preguntarse si el paro sirve para que la Argentina vuelva a crecer”, señaló.
En un entrevista concedida al diario La Nación, el jefe del Gabinete Nacional, Chrystian Colombo admitió que hubo una medida de fuerza importante pero instó a preguntarse si la metodología “fue la adecuada, ya que los problemas –dijo- no se van a solucionar con el paro”.
Según explicó Colombo, el gobierno de Fernando De la Rúa está llevando adelante las reformas que hacen falta para que la economía argentina crezca, y aclaró que el primer mandatario es conciente de los costos políticos que conlleva ese camino.
Colombo señaló que la pérdida de popularidad y la falta de consenso social son parte de esos costos, pero advirtió que ni el presidente ni su gabinete están pensando en recuperar popularidad o ganar un voto sino en resolver objetivamente los problemas que aquejan al país.
Consultado acerca de si el grado de conflictividad social aumentará durante los meses de verano, Colombo admitió no tener una idea clara al respecto, aunque si admitió que tal como están las cosas “no habrán vacaciones” para él, ni para ningún integrante del Gobierno.
El funcionario también comentó con respecto a si el alto acatamiento del paro refleja el descontento de la gente que “hay que preguntarse si la metodología de un paro, planteado al principio con intimidación y violencia, es una forma de solucionar los problemas”.
“Y aunque no hubo violencia –continúo- hubo intimidación y fueron detenidos in fraganti delegados de UTA cuando tiraban miguelitos, y hay colectivos quemados”.
Para Colombo “en una sociedad que lleva más de cinco años con un porcentaje de desempleo superior a 13%, que ha dejado de lado una cantidad muy grande de gente, está claro que hay un grado de descontento grande. Es innegable y, como esto perdura desde hace muchos años, la gente está más cansada. Pero hay que preguntarse si el paro sirve para que la Argentina vuelva a crecer”, señaló.