Los docentes hacen punta en una ofensiva salarial extra CGT del 30 %, que arrastraría al resto de los estatales
Los salarios docentes, un rubro fuerte del gasto público, vuelven a la carga en la paritaria. El reclamo precede al reconocimiento presidencial de la CTA y se lanza justo en el mes previo al inicio de clases. Los estatales suelen plegarse.
El gremio de los maestros se despachó con el reclamo de 30 % de aumento
y un básico de 1.040 pesos en todo el país, justo cuando su ex titular
y actual líder de la Central de Trabajadores Argentinos (CTA), Hugo Yasky,
logró que la presidenta Cristina Kirchner le abra mañana a las 15
las puertas de la Casa Rosada, contrariando a la CGT que conduce Hugo Moyano.
La demanda, que se ubica 50% arriba de la “moderación” sugerida
desde la cima de la CGT luego de entrevistarse con la primera mandataria, cobra
mayor vigor aún, al instalarse en el mes previo al inicio de las clases.
También se negocian en el marco de la convención laboral modificaciones
a la carrera de magisterio y la formación de una “Comisión
Federal de Mediación”, pero el eje de atención es el porcentaje
de incremento salarial.
Si bien las conversaciones de reanudarán el próximo martes 12,
y en el medio los representantes sectoriales visitarán el despacho presidencial,
las partes coinciden en señalar la urgencia de arribar a un entendimiento
básico nacional, a fin de dar tiempo a las provincias a arreglar sus
propios acuerdos con la antelación suficiente para que no peligre el
comienzo del ciclo lectivo.
Aunque la calidad educativa está fuera del debate, la posición
gremial es que los sueldos deben reflejar la responsabilidad de los docentes
ante la sociedad, tal como dijera Yasky en declaraciones radiales.
Igual que como sucediera cuando el ex ministro de Educación y por entonces
candidato oficialista a jefe de Gobierno, Daniel Filmus, otorgara un aumento
general a los maestros, esta ofensiva gremial no sólo actúa sobre
la plantilla relacionada con la educación, sino que apalanca reclamos
del resto de los gremios estatales en las provincias.
El margen que disponen las distintas jurisdicciones y la propia nación
para afrontar un salto salarial como el instalado por los docentes en la paritaria
no sería suficiente, a pesar de que hoy el superávit primario
se recuperó a buen ritmo, sobre todo luego del alza de los ingresos previsionales.
La recaudación no es un chicle
La consultora Prefinex advirtió en su último informe que no hay
que engolosinarse tanto con los registros récord de recaudación,
ya que provienen principalmente del IVA y los impuestos a la exportación,
ambos influidos en forma determinante por la inflación, en el primer
caso, y los precios agrícolas internacionales, en el segundo.
El economista Nicolás Bridger advierte que “sería peligroso
que el gobierno utilizará estos ingresos, que podrían no ser permanentes,
para financiar gastos que la historia ha probado inflexibles a la baja en tiempos
de vacas flacas”. Agrega que “si a esto le sumamos un panorama internacional
turbulento y la falta de acceso a los mercados de capitales, la vuelta a la
prudencia fiscal (es decir aumentar el gasto menos que los ingresos) se hace
imperioso”.
Además, se pregunta sobre la sustentabilidad de una recaudación
que depende en forma creciente de la inflación y de precios internacionales
record, cuando estos últimos constituyen una variable exógena
para el gobierno.
En el informe de enero consigna que hubo una recaudación de $ 21.729
millones, lo cual constituye un record en términos del PIB (26,1%) y
significa un incremento de 49% a/a (mayor suba desde mayo de 2004).
Esta fuerte alza estuvo sustentada fundamentalmente por dos tributos: por IVA
neto de devoluciones se recaudaron $ 6.478 millones por este concepto (+45,1%
a/a), explicando el 28% del incremento total de la recaudación. Teniendo
en cuenta que el consumo crece a un ritmo cercano al 10% anual y suponiendo
un 5% de mejora por menor evasión, la inflación estaría
explicando más de la mitad de la suba del IVA. Por Impuestos a la exportación
se recaudaron $ 3.215 millones (+157,4% a/a), explicando 27,3% del incremento
total de la recaudación en enero. La explosión en la recaudación
se deriva de precios internacionales de commodities record (+60% a/a) y la suba
en la presión impositiva instrumentada en noviembre de 2007. De esta
forma este tributo ahora representa el 15% de la recaudación total, cuando
hace un año sólo acumulaba un 7,3%.
La evolución de los otros dos tributos más importantes también
exhibió una suba importante. El impuesto a las ganancias totalizó
$ 3.940 millones (18,1% de la recaudación total) y mostró un crecimiento
interanual de 31,3%. Por su parte, los ingresos por seguridad social sumaron
$ 4.321 millones (20% de la recaudación total), lo cual implica un incremento
de 36% respecto a enero de 2007.
La secretaria general de CTERA, que integra la mesa de la CTA, Stella Maldonado,
abre el juego de lo que será el gran planteo de la central alternativa
a la CGT: que la discusión salarial sea un piso y no un techo y la propuesta
de la paritaria social”, según la cual debe plantearse la necesidad
de incorporar a la mejora del ingreso a casi 50 % de la población que
trabaja en negro.
Mañana, los 20 asistentes de CTA a la Casa Rosada llevarán esas
inquietudes a la presidenta, lo mismo que otras relacionadas con una nueva ley
nacional de salud, un fondo estatal de salarios para que los trabajadores estatales
puedan cobrar por igual trabajo, igual salario, la necesidad de una reforma
tributaria y la necesidad de una nueva ley de radiodifusión”, según
adelantó el secretario de Comunicaciones de la entidad, Juan Carlos Guiliani.
El gremio de los maestros se despachó con el reclamo de 30 % de aumento
y un básico de 1.040 pesos en todo el país, justo cuando su ex titular
y actual líder de la Central de Trabajadores Argentinos (CTA), Hugo Yasky,
logró que la presidenta Cristina Kirchner le abra mañana a las 15
las puertas de la Casa Rosada, contrariando a la CGT que conduce Hugo Moyano.
La demanda, que se ubica 50% arriba de la “moderación” sugerida
desde la cima de la CGT luego de entrevistarse con la primera mandataria, cobra
mayor vigor aún, al instalarse en el mes previo al inicio de las clases.
También se negocian en el marco de la convención laboral modificaciones
a la carrera de magisterio y la formación de una “Comisión
Federal de Mediación”, pero el eje de atención es el porcentaje
de incremento salarial.
Si bien las conversaciones de reanudarán el próximo martes 12,
y en el medio los representantes sectoriales visitarán el despacho presidencial,
las partes coinciden en señalar la urgencia de arribar a un entendimiento
básico nacional, a fin de dar tiempo a las provincias a arreglar sus
propios acuerdos con la antelación suficiente para que no peligre el
comienzo del ciclo lectivo.
Aunque la calidad educativa está fuera del debate, la posición
gremial es que los sueldos deben reflejar la responsabilidad de los docentes
ante la sociedad, tal como dijera Yasky en declaraciones radiales.
Igual que como sucediera cuando el ex ministro de Educación y por entonces
candidato oficialista a jefe de Gobierno, Daniel Filmus, otorgara un aumento
general a los maestros, esta ofensiva gremial no sólo actúa sobre
la plantilla relacionada con la educación, sino que apalanca reclamos
del resto de los gremios estatales en las provincias.
El margen que disponen las distintas jurisdicciones y la propia nación
para afrontar un salto salarial como el instalado por los docentes en la paritaria
no sería suficiente, a pesar de que hoy el superávit primario
se recuperó a buen ritmo, sobre todo luego del alza de los ingresos previsionales.
La recaudación no es un chicle
La consultora Prefinex advirtió en su último informe que no hay
que engolosinarse tanto con los registros récord de recaudación,
ya que provienen principalmente del IVA y los impuestos a la exportación,
ambos influidos en forma determinante por la inflación, en el primer
caso, y los precios agrícolas internacionales, en el segundo.
El economista Nicolás Bridger advierte que “sería peligroso
que el gobierno utilizará estos ingresos, que podrían no ser permanentes,
para financiar gastos que la historia ha probado inflexibles a la baja en tiempos
de vacas flacas”. Agrega que “si a esto le sumamos un panorama internacional
turbulento y la falta de acceso a los mercados de capitales, la vuelta a la
prudencia fiscal (es decir aumentar el gasto menos que los ingresos) se hace
imperioso”.
Además, se pregunta sobre la sustentabilidad de una recaudación
que depende en forma creciente de la inflación y de precios internacionales
record, cuando estos últimos constituyen una variable exógena
para el gobierno.
En el informe de enero consigna que hubo una recaudación de $ 21.729
millones, lo cual constituye un record en términos del PIB (26,1%) y
significa un incremento de 49% a/a (mayor suba desde mayo de 2004).
Esta fuerte alza estuvo sustentada fundamentalmente por dos tributos: por IVA
neto de devoluciones se recaudaron $ 6.478 millones por este concepto (+45,1%
a/a), explicando el 28% del incremento total de la recaudación. Teniendo
en cuenta que el consumo crece a un ritmo cercano al 10% anual y suponiendo
un 5% de mejora por menor evasión, la inflación estaría
explicando más de la mitad de la suba del IVA. Por Impuestos a la exportación
se recaudaron $ 3.215 millones (+157,4% a/a), explicando 27,3% del incremento
total de la recaudación en enero. La explosión en la recaudación
se deriva de precios internacionales de commodities record (+60% a/a) y la suba
en la presión impositiva instrumentada en noviembre de 2007. De esta
forma este tributo ahora representa el 15% de la recaudación total, cuando
hace un año sólo acumulaba un 7,3%.
La evolución de los otros dos tributos más importantes también
exhibió una suba importante. El impuesto a las ganancias totalizó
$ 3.940 millones (18,1% de la recaudación total) y mostró un crecimiento
interanual de 31,3%. Por su parte, los ingresos por seguridad social sumaron
$ 4.321 millones (20% de la recaudación total), lo cual implica un incremento
de 36% respecto a enero de 2007.
La secretaria general de CTERA, que integra la mesa de la CTA, Stella Maldonado,
abre el juego de lo que será el gran planteo de la central alternativa
a la CGT: que la discusión salarial sea un piso y no un techo y la propuesta
de la paritaria social”, según la cual debe plantearse la necesidad
de incorporar a la mejora del ingreso a casi 50 % de la población que
trabaja en negro.
Mañana, los 20 asistentes de CTA a la Casa Rosada llevarán esas
inquietudes a la presidenta, lo mismo que otras relacionadas con una nueva ley
nacional de salud, un fondo estatal de salarios para que los trabajadores estatales
puedan cobrar por igual trabajo, igual salario, la necesidad de una reforma
tributaria y la necesidad de una nueva ley de radiodifusión”, según
adelantó el secretario de Comunicaciones de la entidad, Juan Carlos Guiliani.
