Los abogados de Ramini recusaron al juez Urso
Consideran que el magistrado incurrió en "enemistad manifiesta" con su cliente. El empresario había admitido, ante una cámara oculta, su presunta vinculación con la venta ilegal de armas.
(NA). – Los abogados del empresario Angel Ramini recusaron hoy al juez federal Jorge Urso por considerar que el magistrado incurrió en “enemistad manifiesta”, al haberle brindado a su cliente “un trato diferenciado” con respecto al que en la víspera se le dio al arquitecto Alberto Rossi.
Así lo señalaron los abogados Alberto Faes y Félix Linfante, quienes presentaron hoy la recusación del juez que mantiene detenido a Ramini, el empresario que, ante una cámara oculta, admitió su presunta vinculación con la venta ilegal de armas al exterior.
Los letrados consideraron que “habiendo tomado conocimiento parcial del contenido de las públicas manifestaciones que se le endilgan a nuestro pupilo, las cuales alcanzan en forma personal a vuestra señoría y a su núcleo familiar, es que entendemos que de ser ciertas las mismas importaría una expresa causa de inhibición”.
Ante la cámara oculta, Ramini se había jactado de ser “amigo” de “80% de los jueces federales” hasta el punto de “juntas las mesas y traer las chicas a bailar”, consideraciones por las que, una vez sentado ante el juez Urso, debió pedir disculpas y admitir que eran “ridículas”.
Para los abogados, estas declaraciones aún “en el caso de que no se correspondan con la realidad, tiñen la actuación del magistrado pudiendo ello incidir en forma directa sobre la
imparcialidad” del juez porque –a su entender– “pueden haber sido consideradas como una acusación referente a la intervención de los juzgados que generara en el ánimo del magistrado una animadversión”.
Con respecto al trato brindado por el juzgado a Ramini y a su compañero Rossi, el letrado indicó que “quedó claramente demostrado que la ausencia del país de Ramini se produjo con anterioridad a tomar conocimiento de la existencia de la imputación en su contra”, mientras que Rossi estuvo en calidad de prófugo durante dos semanas, en las que alegó estar en un estado “depresivo” que no le permitía declarar.
“Vale recalcar que el lapso que fue desde su detención en horas de la mañana del 16 de octubre hasta la finalización de su declaración el 17 de octubre, el mismo estuvo detenido e
incomunicado”, explicó Faes, quien agregó que “entre tanto nada se sabía acerca de la situación de sus dos consortes de causa (Rossi y el empresario Alfredo Aguirre)”.
Los defensores remarcaron que “seis días hábiles después” se entregó Rossi, cuya “suerte sorpresivamente fue otra” y agregó que su declaración se produjo el mismo día “sin incomunicación ni postergación, ni ninguno de los padecimientos innecesario a los que fue sometido nuestro pupilo”.
Rossi, Aguirre y Ramini fueron registrados por una cámara oculta del programa Telenoche Investiga en la cual el último de ellos se autoasumió como el titular “en las sombras” de la firma Express Cargas, la cual habría tenido participación en el contrabando de miles de toneladas de armamento bélico, aunque en su declaración indagatoria negó los dichos difundidos en el programa.
De los denominados “tres mosqueteros”, sólo Aguirre permanece en calidad de prófugo y según informó su abogado defensor Víctor Stinfale, su cliente no se presentará hasta que la Cámara federal se pronuncie sobre el pedido de eximición de prisión que el juez
Urso le rechazó.
(NA). – Los abogados del empresario Angel Ramini recusaron hoy al juez federal Jorge Urso por considerar que el magistrado incurrió en “enemistad manifiesta”, al haberle brindado a su cliente “un trato diferenciado” con respecto al que en la víspera se le dio al arquitecto Alberto Rossi.
Así lo señalaron los abogados Alberto Faes y Félix Linfante, quienes presentaron hoy la recusación del juez que mantiene detenido a Ramini, el empresario que, ante una cámara oculta, admitió su presunta vinculación con la venta ilegal de armas al exterior.
Los letrados consideraron que “habiendo tomado conocimiento parcial del contenido de las públicas manifestaciones que se le endilgan a nuestro pupilo, las cuales alcanzan en forma personal a vuestra señoría y a su núcleo familiar, es que entendemos que de ser ciertas las mismas importaría una expresa causa de inhibición”.
Ante la cámara oculta, Ramini se había jactado de ser “amigo” de “80% de los jueces federales” hasta el punto de “juntas las mesas y traer las chicas a bailar”, consideraciones por las que, una vez sentado ante el juez Urso, debió pedir disculpas y admitir que eran “ridículas”.
Para los abogados, estas declaraciones aún “en el caso de que no se correspondan con la realidad, tiñen la actuación del magistrado pudiendo ello incidir en forma directa sobre la
imparcialidad” del juez porque –a su entender– “pueden haber sido consideradas como una acusación referente a la intervención de los juzgados que generara en el ánimo del magistrado una animadversión”.
Con respecto al trato brindado por el juzgado a Ramini y a su compañero Rossi, el letrado indicó que “quedó claramente demostrado que la ausencia del país de Ramini se produjo con anterioridad a tomar conocimiento de la existencia de la imputación en su contra”, mientras que Rossi estuvo en calidad de prófugo durante dos semanas, en las que alegó estar en un estado “depresivo” que no le permitía declarar.
“Vale recalcar que el lapso que fue desde su detención en horas de la mañana del 16 de octubre hasta la finalización de su declaración el 17 de octubre, el mismo estuvo detenido e
incomunicado”, explicó Faes, quien agregó que “entre tanto nada se sabía acerca de la situación de sus dos consortes de causa (Rossi y el empresario Alfredo Aguirre)”.
Los defensores remarcaron que “seis días hábiles después” se entregó Rossi, cuya “suerte sorpresivamente fue otra” y agregó que su declaración se produjo el mismo día “sin incomunicación ni postergación, ni ninguno de los padecimientos innecesario a los que fue sometido nuestro pupilo”.
Rossi, Aguirre y Ramini fueron registrados por una cámara oculta del programa Telenoche Investiga en la cual el último de ellos se autoasumió como el titular “en las sombras” de la firma Express Cargas, la cual habría tenido participación en el contrabando de miles de toneladas de armamento bélico, aunque en su declaración indagatoria negó los dichos difundidos en el programa.
De los denominados “tres mosqueteros”, sólo Aguirre permanece en calidad de prófugo y según informó su abogado defensor Víctor Stinfale, su cliente no se presentará hasta que la Cámara federal se pronuncie sobre el pedido de eximición de prisión que el juez
Urso le rechazó.
