El Gobierno logró comprometer a los bancos que manejan el negocio de colocar títulos de deuda pública, para que incrementen en 50% las compras de esos papeles durante el año próximo y, además, acerquen un monto significativo de ofertas en cada licitación que permita asegurar de antemano casi 90% de las colocaciones.
De esta manera, avanzó en su idea de garantizar la refinanciación de más de $ 6.500 millones, según una estimación oficiosa, en títulos de deuda sobre los casi $ 11 mil millones que vencen durante el año próximo.
El nuevo acuerdo establece que los 12 bancos que participan de las emisiones de deuda pública desde 1996 elevarán de 4 a 6% su compromiso de compras de bonos (sean letras o bonos del Tesoro) en cada licitación que realice la Secretaría de Financiamiento durante el 2001.
El Gobierno se asegura así ,de antemano, la colocación de al menos 72% de las nuevas emisiones, contra 48% que tenía cubierto hasta aquí.
Pero, además, se rediseñó otra cláusula por la que los bancos deben ahora comprometerse a acercar en cada licitación ofertas por al menos 9% del monto total por ser colocado; anteriormente, esa precondición ya existía, pero no establecía un piso.
Ocurre que, al cuantificar esa obligación, el Gobierno logrará que los bancos deban acercar ofertas que superen como mínimo en 8% el monto por licitar, con lo que se asegura una cuota importante de liquidez.
Manuel Sacerdote, titular del BankBoston, afirmó que la entidad suscribirá el compromiso que no establece limitaciones en el precio: sólo buscan no dejar flancos abiertos para que el cronograma de colocaciones locales del 2001, que se dará a conocer a mediados del mes próximo, no enfrente algún tipo de tropiezos en cuanto al nivel de ofertas.
Con este nivel de demanda asegurada, en el mercado confían en que el Gobierno se concentre en llevar adelante las reformas que permitan una baja del riesgo país y ayuden a bajar el costo del dinero; cabe recordar que hace sólo unas semanas, llegó a pagar una tasa de 16% anual por colocar deuda.
El Gobierno logró comprometer a los bancos que manejan el negocio de colocar títulos de deuda pública, para que incrementen en 50% las compras de esos papeles durante el año próximo y, además, acerquen un monto significativo de ofertas en cada licitación que permita asegurar de antemano casi 90% de las colocaciones.
De esta manera, avanzó en su idea de garantizar la refinanciación de más de $ 6.500 millones, según una estimación oficiosa, en títulos de deuda sobre los casi $ 11 mil millones que vencen durante el año próximo.
El nuevo acuerdo establece que los 12 bancos que participan de las emisiones de deuda pública desde 1996 elevarán de 4 a 6% su compromiso de compras de bonos (sean letras o bonos del Tesoro) en cada licitación que realice la Secretaría de Financiamiento durante el 2001.
El Gobierno se asegura así ,de antemano, la colocación de al menos 72% de las nuevas emisiones, contra 48% que tenía cubierto hasta aquí.
Pero, además, se rediseñó otra cláusula por la que los bancos deben ahora comprometerse a acercar en cada licitación ofertas por al menos 9% del monto total por ser colocado; anteriormente, esa precondición ya existía, pero no establecía un piso.
Ocurre que, al cuantificar esa obligación, el Gobierno logrará que los bancos deban acercar ofertas que superen como mínimo en 8% el monto por licitar, con lo que se asegura una cuota importante de liquidez.
Manuel Sacerdote, titular del BankBoston, afirmó que la entidad suscribirá el compromiso que no establece limitaciones en el precio: sólo buscan no dejar flancos abiertos para que el cronograma de colocaciones locales del 2001, que se dará a conocer a mediados del mes próximo, no enfrente algún tipo de tropiezos en cuanto al nivel de ofertas.
Con este nivel de demanda asegurada, en el mercado confían en que el Gobierno se concentre en llevar adelante las reformas que permitan una baja del riesgo país y ayuden a bajar el costo del dinero; cabe recordar que hace sólo unas semanas, llegó a pagar una tasa de 16% anual por colocar deuda.