FMI: “las últimas reuniones con funcionarios argentinos fueron constructivas”
"Las discusiones fueron constructivas. Acordamos mantenernos en contacto respecto de las principales cuestiones económicas", agregó el portavoz del FMI, Francisco Baker, en alusión a las negociaciones que la semana pasada mantuvieron técnicos de la
Baker puntualizó también que la reunión anual del FMI, que
comienza sobre el final de esta semana y a la que asistirá el
ministro Roberto Lavagna, dará “la mejor oportunidad para que las
dos partes vuelvan a encontrarse”.
Por otra parte, otras fuentes financieras confirmaron durante
la jornada de ayer que no viajará a la Argentina el indio Anoop
Singh, jefe del Departamento del Hemisferio Occidental.
Trascendió también que el inglés Dods Word sería el nuevo
encargado del caso argentino en el Fondo Monetario Internacional
(FMI), en un nuevo movimiento dentro del organismo en el marco de
la compleja relación ente las partes.
Word reemplazaría formalmente al indio Anoop Singh, quien fue
ascendido al jefe del Hemisferio Occidental, mientras que otro
inglés, John Thorthon, se encarga momentáneamente del caso
argentino.
Así lo dijo el ex viceministro de Economía Orlando Ferreres, de
contactos fluídos con el poder financiero, quien señaló que Word
es un inglés típico que “seguramente encontrará una forma
elegante” de negociar con la Argentina y “quizá obtenga
resultados”.
Ferreres señaló que el Fondo Monetario ha “cambiando mucha
gente en el último año y medio” y, según indicó, “no mantiene una
línea” sobre este tema.
“En el Fondo hay críticas y discusiones internas sobre lo que
hay que hacer con la Argentina, porque nadie quiere ponerle la
firma a un acuerdo que tiene muchas dudas”, dijo Ferreres.
Ferreres expresó que el problema argentino es “básicamente
político”, ya que existe un poder que “ha roto todos los
contratos”.
Manifestó que el Fondo “ve cómo en la Argentina todos los días
se cambia la cancha” y ésto a la gente del Fondo la vuelve “un
poco loca”.
“La volatilidad de las decisiones nuestras hace difícil conocer
cómo seguirá la situación argentina en el futuro”, agrepó el ex
funcionario del gobierno menemista.
Por lo tanto, Ferreres manifestó que “el problema es político,
ya que no tenemos claridad hacia donde marchamos”.
Con respecto a la deuda, Ferreres dijo que el país debe 88.000
millones de dólares solamente con los acreedores del exterior,
sobre un total de unos 144.000 millones, incluyendo el
endeudamiento interno.
Baker puntualizó también que la reunión anual del FMI, que
comienza sobre el final de esta semana y a la que asistirá el
ministro Roberto Lavagna, dará “la mejor oportunidad para que las
dos partes vuelvan a encontrarse”.
Por otra parte, otras fuentes financieras confirmaron durante
la jornada de ayer que no viajará a la Argentina el indio Anoop
Singh, jefe del Departamento del Hemisferio Occidental.
Trascendió también que el inglés Dods Word sería el nuevo
encargado del caso argentino en el Fondo Monetario Internacional
(FMI), en un nuevo movimiento dentro del organismo en el marco de
la compleja relación ente las partes.
Word reemplazaría formalmente al indio Anoop Singh, quien fue
ascendido al jefe del Hemisferio Occidental, mientras que otro
inglés, John Thorthon, se encarga momentáneamente del caso
argentino.
Así lo dijo el ex viceministro de Economía Orlando Ferreres, de
contactos fluídos con el poder financiero, quien señaló que Word
es un inglés típico que “seguramente encontrará una forma
elegante” de negociar con la Argentina y “quizá obtenga
resultados”.
Ferreres señaló que el Fondo Monetario ha “cambiando mucha
gente en el último año y medio” y, según indicó, “no mantiene una
línea” sobre este tema.
“En el Fondo hay críticas y discusiones internas sobre lo que
hay que hacer con la Argentina, porque nadie quiere ponerle la
firma a un acuerdo que tiene muchas dudas”, dijo Ferreres.
Ferreres expresó que el problema argentino es “básicamente
político”, ya que existe un poder que “ha roto todos los
contratos”.
Manifestó que el Fondo “ve cómo en la Argentina todos los días
se cambia la cancha” y ésto a la gente del Fondo la vuelve “un
poco loca”.
“La volatilidad de las decisiones nuestras hace difícil conocer
cómo seguirá la situación argentina en el futuro”, agrepó el ex
funcionario del gobierno menemista.
Por lo tanto, Ferreres manifestó que “el problema es político,
ya que no tenemos claridad hacia donde marchamos”.
Con respecto a la deuda, Ferreres dijo que el país debe 88.000
millones de dólares solamente con los acreedores del exterior,
sobre un total de unos 144.000 millones, incluyendo el
endeudamiento interno.
