Finalizó la cumbre en Brasilia

Los presidentes de América de Sur avanzaron hacia el proceso de integración del continente. La Argentina recibió un contundente apoyo respecto a la soberanía de las Islas Malvinas.

1 septiembre, 2000

Inspirados en el principio de la defensa de la democracia y la paz, los presidentes de América del Sur dieron hoy (viernes 1) en Brasilia comienzo al proceso de integración del continente, con la profundización de las relaciones entre el Mercosur y la Comunidad Andina de Naciones, y la incorporación de Surinam y Guyana.

Los principales conceptos que conducirán este proceso fueron fijados en la declaración final que firmaron los 12 primeros mandatarios que concluyeron las deliberaciones de la Primera Cumbre de Presidentes de América del Sur que se extendió entre ayer y hoy.

Los jefes de estado decidieron avanzar hacia la integración entre el CAN (Venezuela, Colombia, Ecuador, Perú y Bolivia) y el Mercosur (Brasil, la Argentina, Uruguay y Paraguay), respaldar el ingreso total de Chile al sub bloque regional y convocar a Guyana y Surinam a la creación de “un espacio económico comercial ampliado en América del Sur”.

También decidieron declarar al conosur de América como Zona de Paz, y establecieron una cláusula democrática que establece la expulsión de cualquier foro regional del país que se aparte de la continuidad institucional.

“El respeto decidido a los valores de la democracia representativa y de sus procedimientos, de los derechos humanos, del derecho internacional, del desarme y de la no proliferación de armas de destrucción masiva constituye la base esencial del proceso de cooperación e integración en que están empeñados los países sudamericanos”, indica el comunicado difundido.

La Argentina recibió un contundente apoyo de los 12 presidentes que integraron la cumbre, en su reclamo ante el Reino Unido por la soberanía de las Islas Malvinas, e instaron a los gobiernos de ambos países a “reanudar las negociaciones”.

Si embargo, el mensaje estuvo dirigido a Gran Bretaña. Los mandatarios criticaron las “situaciones coloniales” en el continente americano, pues consideraron que “resultan incompatibles con los ideales de paz” de estos tiempos.

Otro de los temas importantes que se trataron se refirió a la situación en que se encuentra Colombia respecto a la paz interna, aunque los mandatarios prefirieron evitar la mención del plan de asistencia militar de Estado Unidos.

Los presidentes formularon un “decidido apoyo a los esfuerzos en favor de la paz emprendidos por el gobierno de Colombia”.

Una declaración conjunta señala que “la reunión de presidentes manifiesta, además, su convicción de que las valerosas medidas adoptadas por el presidente de Colombia (Andrés Pastrana) ayudarán a fomentar un clima de confianza entre las partes involucradas en el conflicto interno colombiano, para alcanzar una paz firme y duradera y la reconciliación de su país”.

Inspirados en el principio de la defensa de la democracia y la paz, los presidentes de América del Sur dieron hoy (viernes 1) en Brasilia comienzo al proceso de integración del continente, con la profundización de las relaciones entre el Mercosur y la Comunidad Andina de Naciones, y la incorporación de Surinam y Guyana.

Los principales conceptos que conducirán este proceso fueron fijados en la declaración final que firmaron los 12 primeros mandatarios que concluyeron las deliberaciones de la Primera Cumbre de Presidentes de América del Sur que se extendió entre ayer y hoy.

Los jefes de estado decidieron avanzar hacia la integración entre el CAN (Venezuela, Colombia, Ecuador, Perú y Bolivia) y el Mercosur (Brasil, la Argentina, Uruguay y Paraguay), respaldar el ingreso total de Chile al sub bloque regional y convocar a Guyana y Surinam a la creación de “un espacio económico comercial ampliado en América del Sur”.

También decidieron declarar al conosur de América como Zona de Paz, y establecieron una cláusula democrática que establece la expulsión de cualquier foro regional del país que se aparte de la continuidad institucional.

“El respeto decidido a los valores de la democracia representativa y de sus procedimientos, de los derechos humanos, del derecho internacional, del desarme y de la no proliferación de armas de destrucción masiva constituye la base esencial del proceso de cooperación e integración en que están empeñados los países sudamericanos”, indica el comunicado difundido.

La Argentina recibió un contundente apoyo de los 12 presidentes que integraron la cumbre, en su reclamo ante el Reino Unido por la soberanía de las Islas Malvinas, e instaron a los gobiernos de ambos países a “reanudar las negociaciones”.

Si embargo, el mensaje estuvo dirigido a Gran Bretaña. Los mandatarios criticaron las “situaciones coloniales” en el continente americano, pues consideraron que “resultan incompatibles con los ideales de paz” de estos tiempos.

Otro de los temas importantes que se trataron se refirió a la situación en que se encuentra Colombia respecto a la paz interna, aunque los mandatarios prefirieron evitar la mención del plan de asistencia militar de Estado Unidos.

Los presidentes formularon un “decidido apoyo a los esfuerzos en favor de la paz emprendidos por el gobierno de Colombia”.

Una declaración conjunta señala que “la reunión de presidentes manifiesta, además, su convicción de que las valerosas medidas adoptadas por el presidente de Colombia (Andrés Pastrana) ayudarán a fomentar un clima de confianza entre las partes involucradas en el conflicto interno colombiano, para alcanzar una paz firme y duradera y la reconciliación de su país”.

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