Ante el aislacionismo económico argentino, el cual la próxima Administración deberá corregir procediendo a procesos de mayor apertura, la protección del empleo dependerá de otras razones (inversión, estabilidad y orden macroeconómicos, tasa de productividad, tasa de inflación, tipo de cambio, regulaciones varias), señala el informe número 117 de Desarrollo de Negocios Internacionales (DNI), con la firma de su director Marcelo Elizondo.
El temor a una mayor apertura (necesaria para recuperar dinamismo económico) no deberá ser rechazado necesariamente en las discusiones que se avecinarán, ante una hipotética pero no probada directa afectación a la tasa de empleo.
Se sabe que Argentina es desde hace años uno de los países más proteccionistas del mundo. Esto es, se trata de una de las economías que con más instrumentos restringe el ingreso de productos (bienes finales, insumos, bienes de capital, productos primarios, piezas y partes, o servicios) importados o extranjeros.
En muchas ocasiones se hace referencia a que la razón de ese proteccionismo es la defensa del empleo. O sea: se afirma que mas apertura afectaría o amenazaría el empleo local. Ahora bien: ¿es este planteo acertado?
Una buena manera de analizar esto es, en primer lugar, tratar de ubicar a Argentina en el listado de países en relación a sus proteccionismos, y, después, comparar sus indicadores de desempleo.
¿Cómo medir a los más proteccionistas?
Al respecto, un índice de valor para entender el grado de proteccionismo es el provisto por la ICC, la International Chamber of Commerce (la Cámara de Comercio Internacional), creada en 1919 con el objeto de promover a nivel mundial “buenas prácticas comerciales”. Esta institución efectúa anualmente un índice en el que ubica a 80 países en un ránking que cuenta con 5 categorías: (con países a los que califica según su grado de proteccionismo con un puntaje de entre 1 y 6)-
La categoría 1 (en ese ránking) está integrada por las economías muy abiertas a las que califica con un puntaje de 5 o 6 puntos en su escala; la categoría 2 (de mayor proteccionismo relativo que la primera pero menor al de las que le siguen) está integrada por economías que ubica entre las que califica con entre 4 y 4,99 puntos; la categoría 3 (de aún mayor proteccionismo que las anteriores), integrada por las economías a las que califica con entre 3 y 3,99 puntos; la categoría 4 está formada por las economías que califica con 2 a 2,99; y la última categoría, la 5 (la de economías más proteccionistas), está integrada por los países que califica con entre 1 y 1,99 puntos.
Los parámetros que analiza para el estudio la ICC son la apertura comercial observada, la política comercial, la apertura a la inversión extranjera directa y la infraestructura comercial internacional.
La ICC considera, así, diversas variables para analizar el grado de proteccionismo relativo de cada país.
Los más y los menos proteccionistas del mundo
Según el último ránking disponible de la institución, que tiene datos de 2013, sólo Hong Kong y Singapur están en la categoría 1 (con 5,5 puntos ambos). Son los de apertura “excelente”.
Luego, en la categoría 2, ubica a países como Luxemburgo, Bélgica, Holanda, Emiratos Árabes, Irlanda, Suiza, Suecia, Austria, Finlandia, Nueva Zelanda o Australia; mientras en la categoría 3 ubica a países como EEUU, Japón, Italia, Sudáfrica, Arabia Saudita, o México; luego en la categoría 4 pone a países como los del BRIC (China Rusia India y Brasil); y finalmente entre los de peor calificación, en la categoría 5, están pases como Etiopía, Sudán o Bangladesh.
Ahora bien: resulta interesante, a los efectos del objeto de este trabajo, desagregar (después de observar en su totalidad esa lista) la ubicación de los países americanos, para saber en qué posición de encuentran nuestros vecinos hemisféricos y lograr un “mini ránking” regional para después proceder a la comparación con las tasas de desempleo de cada uno.
Países americanos. Los más y los menos proteccionistas
De acuerdo con la ICC, los países del norte de América y los andinos son los menos proteccionistas. Y los del Mercosur, los más proteccionistas en nuestro gran continente.
Y si incluimos sólo a los latinoamericanos medidos en el informe, Chile es el menos proteccionista, seguido luego por Perú (el segundo menos proteccionista), después por Colombia (el tercero menos proteccionista), luego por México, seguidamente por Uruguay y después se encuentra Argentina, en posición similar con los socios del Mercosur que le siguen en el ránking.
El índice muestra, en relación a nuestro país, la muy mala colocación que logra (tiene una calificación que es muy menor a las de quienes están mejor ubicados en el ránking mundial, esa calificación está por debajo del promedio del índice de apertura mundial, y muestra que está en la escala mundial 31 posiciones por debajo de Chile, 25 posiciones por debajo de Perú y 11 por debajo de Colombia; y tiene una calificación no muy distinta ni demasiado mejor que la de los que están por debajo de ella en la lista).
En el ránking general mundial, Argentina está por debajo –entre otros- de Túnez, Marruecos, Kazakstán, Jordania, Arabia Saudita, Latvia, Chipre, Lituania o Islandia.
El mayor proteccionismo no generó menos desempleo
Cuando se analiza el proteccionismo argentino (que es generador de menor actividad económica por encarecer acceso a inversiones o insumos, que aleja a la producción local de avances y progresos mundiales, que desvincula a empresas argentinas de las cadenas de valor mundiales que representan el 80% del comercio mundial), se suele argumentar en contra de una mayor apertura y en favor del mayor proteccionismo, que una apertura de más graduación en Argentina afectaría el empleo argentino. O, de otro modo, que el proteccionismo garantiza el empleo local.
No puede hacerse un análisis lineal excluyente que vincule y refiera solo y de manera exclusiva a la relación entre el grado de proteccionismo (medido por la ICC) y la tasa de desempleo; pero sí puede simplemente hacerse una correlación entre la tasa de desempleo (al menos, para comparar realidades más cercanas) de los países de nuestro hemisferio medidos por la ICC y su grado de apertura.
Argentina, siendo de los más proteccionistas, es de los que mayores tasas de desempleo tienen, y, contrario sensu, que los que menos proteccionismo aplican no tienen necesariamente más desempleo (la única excepción es el caso de Colombia).
Hay 5 países latinoamericanos medidos en el informe que son menos proteccionistas que Argentina y tienen menor tasa de desempleo (el único con más desempleo y menos proteccionismo en Colombia).
Más mercados abiertos no significan más desempleo
Una manera adicional pero con resultados coincidentes de analizar esta cuestión es comparar la cantidad de tratados de liberalización comercial que han firmado los países de nuestra región, y, consecuentemente, la cantidad de mercados a los que acceden gracias a esos tratados (lo que implica, en simultáneo, la apertura –y reducción comercial defensiva- de cada país a flujos de ingreso y salida desde esos otros mercados con los que se han firmado acuerdos), con la tasa desempleo de cada uno de estos países de nuestro hemisferio.
En Latinoamérica, el país con más acuerdos comerciales con países/mercados (apertura recíproca) es Chile, que tiene firmados acuerdos de apertura comercial con 59 países.
El segundo es México, con acuerdos que generan apertura con 50 países; seguido de Colombia, con 35 mercados vinculados por estas vías. Los demás países tienen números menores de países con los que se vinculan con tratados firmados (Argentina sólo 12, y el resto de los países fundadores del Mercosur, 11).
A la vez, si se cuentan los acuerdos (tratados de libre comercio, de preferencias arancelarias, de complementación económica, de unión aduanera, etc,) firmados en sí (esto es, cada acuerdo celebrado sin computar la cantidad de mercados incluidos en ese acuerdo sino la cantidad de instrumentos firmados), también Chile es el que más acuerdos ha firmado (son 18 acuerdos comerciales de apertura recíproca negociada, que lo vinculan con mercados que cuentan con más de 4.200 millones de personas); mientras México ha firmado 13 tratados de libre comercio (a los que deben agregarse 9 acuerdos de complementación comercial –de alcance parcial y menor al de un TLC-, y 31 de protección de inversiones); Perú lo ha hecho en un número de 10; Uruguay y Colombia en 5; y Brasil y Argentina en un número de 4.
También en esta cuenta la relación entre acuerdos firmados o mercados con intercambio facilitado y tasa de desempleo no es directa.
Al contrario. Los que más acuerdos han celebrado (Chile, México, Perú), tienen menos tasa de desempleo que Argentina, que ha celebrado menos acuerdos de apertura recíproca comercial y de inversiones.