Felipe González: “la Argentina no tendrá muchas oportunidades más para salir de la crisis”

Así lo afirmó el ex presidente de España, quien agregó que el gobierno argentino tomó la "senda" adecuada para salir de la crisis política y económica.

2 octubre, 2003

González también instó al Gobierno a cumplir con los acreedores
privados del exterior, como una forma de normalizar las relaciones
internacionales del país.

Y destacó que entre las prioridades de la Argentina se encuentra
la normalización de esas relaciones con el exterior pero “no sólo
a través de los términos de la Carta de Intención firmada con el
FMI, sino también con la restructuración de la deuda”.

El ex mandatario español se expresó en estos términos luego de entrevistarse con Kirchner, en la Casa de Gobierno, adonde concurrió acompañado por el empresario mexicano Carlos Slim Heliu.

El ex mandatario viajó a Buenos Aires para participar del
Seminario Internacional sobre “Federalismo Argentino desde una
Perpectiva Comparada”, organizado por el Programa de las Naciones
Unidas para el Desarrollo (PNUD).

“Tengo la esperanza de que el gobierno del presidente Kirchner
supere lo que considero fue una crisis de régimen. Por lo tanto,
es una oportunidad fantástica, pero no hay muchas más”, precisó
González.

Además, hizo un llamado a los “actores políticos y económicos
para que tomen conciencia más allá de las luchas partidarias y los
intereses particulares, y se den cuenta de que el país enfrenta la
superación de lo que ha sido una crisis de régimen”, desatada el
20 de diciembre de 2001.

González señaló que la salida de la crisis “es por la senda en
la que se está”, aunque aclaró que recién “está en el arranque”.
“El Gobierno tiene unos meses de establecido y prioridades
ineludibles desde el punto de vista político hasta la
estabilización definitiva”, agregó.

En ese marco, señaló que “tiene que enfrentar algunos problemas
que casi siempre son condiciones previas, cómo se arregla su
relación con el exterior, incluida la Carta de Intención con el
Fondo y la reestructuración de la deuda”.

“El país está en marcha, el problema es cómo ordenarlo y darle
un sentido de largo y medio plazo, la orientación del gobierno en
ese sentido es consistente”, afirmó González.

Al evaluar la situación del país, dijo que “se están por
despejar algunos elementos y hay un arranque que tiene cierto
interés como la posición adoptada por Argentina respecto al FMI y
la reestructuración de la deuda”.

Evaluó que las decisiones en ese sentido demuestran “una
política de firmeza”.

El ex presidente del gobierno español aseguró que “los
compromisos y la reestructuración de la deuda se hacen desde la
capacidad de pago del país en base a desarrollo y crecimiento”.

Luego, consideró que “hay que cambiar la idea, como sucedía en
la crisis de los ´80 y los ´90, que lo primero que hay que
garantizar son los intereses de los acreedores, cosa que no es
despreciable, pero obviamente es imposible si no se tiene
capacidad de pago en términos de desarrollo”.

De inmediato, aseguró que “esto es como una pesadilla que se
muerde la cola, en la cual el Fondo Monetario ha entrado un montón
de veces porque en realidad los planes no han sido de
estabilización y desarrollo, sino de estabilización y ajuste”.

Explicó que esto “no sólo ha sido el caso de Argentina sino
también desde el tequilazo en México”.

Insistió en afirmar que “sin capacidad de desarrollo y
crecimiento de un país es imposible tener capacidad de pago,
enfoque que lo tiene en claro el gobierno” de Kirchner.

González consideró que para el desarrollo de la región es
necesario lograr “una superación de los cuellos de botella, como
los que se refieren en la Argentina a las infraestructuras de
comunicaciones, energía, agua y otros; además de la recuperación
de la educación y asistencia sanitaria”.

Al respecto, sostuvo que “sin esas variables estratégicas será
muy difícil encarar la modernización de un país con una
potencialidad tan enorme como la de Argentina”.

González también instó al Gobierno a cumplir con los acreedores
privados del exterior, como una forma de normalizar las relaciones
internacionales del país.

Y destacó que entre las prioridades de la Argentina se encuentra
la normalización de esas relaciones con el exterior pero “no sólo
a través de los términos de la Carta de Intención firmada con el
FMI, sino también con la restructuración de la deuda”.

El ex mandatario español se expresó en estos términos luego de entrevistarse con Kirchner, en la Casa de Gobierno, adonde concurrió acompañado por el empresario mexicano Carlos Slim Heliu.

El ex mandatario viajó a Buenos Aires para participar del
Seminario Internacional sobre “Federalismo Argentino desde una
Perpectiva Comparada”, organizado por el Programa de las Naciones
Unidas para el Desarrollo (PNUD).

“Tengo la esperanza de que el gobierno del presidente Kirchner
supere lo que considero fue una crisis de régimen. Por lo tanto,
es una oportunidad fantástica, pero no hay muchas más”, precisó
González.

Además, hizo un llamado a los “actores políticos y económicos
para que tomen conciencia más allá de las luchas partidarias y los
intereses particulares, y se den cuenta de que el país enfrenta la
superación de lo que ha sido una crisis de régimen”, desatada el
20 de diciembre de 2001.

González señaló que la salida de la crisis “es por la senda en
la que se está”, aunque aclaró que recién “está en el arranque”.
“El Gobierno tiene unos meses de establecido y prioridades
ineludibles desde el punto de vista político hasta la
estabilización definitiva”, agregó.

En ese marco, señaló que “tiene que enfrentar algunos problemas
que casi siempre son condiciones previas, cómo se arregla su
relación con el exterior, incluida la Carta de Intención con el
Fondo y la reestructuración de la deuda”.

“El país está en marcha, el problema es cómo ordenarlo y darle
un sentido de largo y medio plazo, la orientación del gobierno en
ese sentido es consistente”, afirmó González.

Al evaluar la situación del país, dijo que “se están por
despejar algunos elementos y hay un arranque que tiene cierto
interés como la posición adoptada por Argentina respecto al FMI y
la reestructuración de la deuda”.

Evaluó que las decisiones en ese sentido demuestran “una
política de firmeza”.

El ex presidente del gobierno español aseguró que “los
compromisos y la reestructuración de la deuda se hacen desde la
capacidad de pago del país en base a desarrollo y crecimiento”.

Luego, consideró que “hay que cambiar la idea, como sucedía en
la crisis de los ´80 y los ´90, que lo primero que hay que
garantizar son los intereses de los acreedores, cosa que no es
despreciable, pero obviamente es imposible si no se tiene
capacidad de pago en términos de desarrollo”.

De inmediato, aseguró que “esto es como una pesadilla que se
muerde la cola, en la cual el Fondo Monetario ha entrado un montón
de veces porque en realidad los planes no han sido de
estabilización y desarrollo, sino de estabilización y ajuste”.

Explicó que esto “no sólo ha sido el caso de Argentina sino
también desde el tequilazo en México”.

Insistió en afirmar que “sin capacidad de desarrollo y
crecimiento de un país es imposible tener capacidad de pago,
enfoque que lo tiene en claro el gobierno” de Kirchner.

González consideró que para el desarrollo de la región es
necesario lograr “una superación de los cuellos de botella, como
los que se refieren en la Argentina a las infraestructuras de
comunicaciones, energía, agua y otros; además de la recuperación
de la educación y asistencia sanitaria”.

Al respecto, sostuvo que “sin esas variables estratégicas será
muy difícil encarar la modernización de un país con una
potencialidad tan enorme como la de Argentina”.

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