En Chubut se impuso el kircherismo por 71,5%, pero en Chaco el final es cabeza a cabeza
Mario das Neves hizo pedazos lo que quedaba del radicalismo ortodoxo, con ayuda del viejo neoperonismo local. Por el contrario, en Chaco, Jorge Cápitanich sorprendió: lograba 47,2%, contra 46,4% para Ángel Rozas.
Contundente resultó la victoria de das Neves. Los restos del radicalismo le aportaron apenas 14,2% a Raúl Barrenechea y el eterno Roque González (Acción chubutense) arañaba apenas 5% . Había perdido el grueso de su antigua clientela, hoy en manos del vecinalismo neoperonista.
Al suspenderse la cuenta chaqueña en la madrugada del lunes, Cápitanich aventajaba a Rozas por apenas 3.000 votos, Al parecer, el inesperado empuje del primero provenía de Resistencia, la capital provincial. Por supuesto, ambos contendientes se atribuían el triunfo, pero el clima no se parecía al escándato cordobés, desatado por un gobernador desorientado –Juan Manuel de la Sota- y dos alas del propio kirchnerismo.
Como en otros distritos, en Chubut la UCR (algunos leen la sigla como “unión cívica residual”) hizo la peor elección de su historia. En realidad, desde que la gobernación fue convertida en provincia junto con Santa Cruz (1957), sin reunir los requisitos de población establecidos por la constitución de 1853/60.
Al respecto, hay detalles curiosos. En 1953 –mientras declinaba el primer peronismo-, el régimen inventó las provincias de Eva Perón (La Pampa) y Presidente Perón (Chaco). La fiebre onomástica de ese gobierno –iniciada durante el “año del Liberador”, 1950- llegó al ridículo: una ciudad también fue rebautizada Eva Perón. Pero no estaba en la provincia homónima. Era La Plata, capital de Buenos Aires.
Volviendo a Chaco, resulta llamativo que la campaña electoral, casi todos los medios y los partidos obviasen la noticia que este año más impresionó al resto del país. Vale decir, la muerte por inanición de varios indígenas, a quien se retacea la asistencia dada a los peruanos de Ica.
Contundente resultó la victoria de das Neves. Los restos del radicalismo le aportaron apenas 14,2% a Raúl Barrenechea y el eterno Roque González (Acción chubutense) arañaba apenas 5% . Había perdido el grueso de su antigua clientela, hoy en manos del vecinalismo neoperonista.
Al suspenderse la cuenta chaqueña en la madrugada del lunes, Cápitanich aventajaba a Rozas por apenas 3.000 votos, Al parecer, el inesperado empuje del primero provenía de Resistencia, la capital provincial. Por supuesto, ambos contendientes se atribuían el triunfo, pero el clima no se parecía al escándato cordobés, desatado por un gobernador desorientado –Juan Manuel de la Sota- y dos alas del propio kirchnerismo.
Como en otros distritos, en Chubut la UCR (algunos leen la sigla como “unión cívica residual”) hizo la peor elección de su historia. En realidad, desde que la gobernación fue convertida en provincia junto con Santa Cruz (1957), sin reunir los requisitos de población establecidos por la constitución de 1853/60.
Al respecto, hay detalles curiosos. En 1953 –mientras declinaba el primer peronismo-, el régimen inventó las provincias de Eva Perón (La Pampa) y Presidente Perón (Chaco). La fiebre onomástica de ese gobierno –iniciada durante el “año del Liberador”, 1950- llegó al ridículo: una ciudad también fue rebautizada Eva Perón. Pero no estaba en la provincia homónima. Era La Plata, capital de Buenos Aires.
Volviendo a Chaco, resulta llamativo que la campaña electoral, casi todos los medios y los partidos obviasen la noticia que este año más impresionó al resto del país. Vale decir, la muerte por inanición de varios indígenas, a quien se retacea la asistencia dada a los peruanos de Ica.
