El PJ endurece su posición
Los gobernadores del justicialismo apuntan a Cavallo. La pulseada irá tomando forma a medida que se acerque el 10 de diciembre. "Ahora vamos por todo", afirmó Ruckauf.
(NA). – Ante el fracaso de las negociaciones por los fondos coparticipables, los gobernadores justicialistas decidieron profundizar la pulseada con la administración de Fernando de la Rúa, que irá tomando forma a medida que se acerque el 10 de diciembre, cuando el justicialismo pasará a controlar el Congreso Nacional y reclamará la presidencia
de ambas cámaras.
La avanzada justicialista, que tendrá a los gobernadores como estrategas y a los legisladores del PJ como ejecutores de iniciativas cada vez más duras, incluye la posibilidad de iniciarle un juicio político al ministro de Economía, Domingo Cavallo, y que el Congreso pase a controlar todas las negociaciones por la deuda externa, según revelaron fuentes partidarias.
El endurecimiento de la posición de los gobernadores justicialistas, que ayer tuvo una ratificación en la decisión de Carlos Ruckauf (Buenos Aires) de retirarse de las negociaciones con la Nación, también podría derivar en la concreción de la anunciada “marcha federal”, que llegaría hasta las puertas mismas de la Casa Rosada.
Esa movilización, de concretarse, contará con el apoyo de las dos CGT, lo que indica que las centrales de Hugo Moyano y Rodolfo Daer –quienes ayer almorzaron con los gobernadores en la Casa de Salta– también formarán parte de la avanzada peronista contra el Gobierno del presidente De la Rúa.
Sin embargo, antes que De la Rúa, los gobernadores del PJ han puesto en la mira sobre Cavallo, a quien combatirán en distintos frentes, pero sobre todo en el legislativo, con iniciativas como estas:
– Impulso a una nueva ley de coparticipación de impuestos, por la cual, todos los ingresos fiscales del país tendrán que ser repartidos entre la Nación y las provincias.
– Derogación de los superpoderes que formalmente tiene el Presidente de la Nación, pero que en los hechos utiliza Cavallo.
– Adhesión e impulso al pedido del ARI de Elisa Carrió para iniciar en la Cámara de Diputados, desde el próximo martes, un proceso de juicio político a Cavallo.
– Revitalización de la Comisión Bicameral de Seguimiento de la Deuda Externa, que desde 1992 (cuando Cavallo era ministro de Carlos Menem) es monitoreada y gestionada exclusivamente por el Ministerio de Economía.
– Aprobación de la coparticipación del “impuesto al cheque”. El PJ lo hará en el Senado tras la media sanción de diputados, controlando los tiempos para que, si el Presidente la veta, el Congreso pueda recurrir al mecanismo de insistencia (dos tercios de cada cámara) sin problema de número.
Todas estas iniciativas serán sustentadas por otras de tipo institucional y judicial: el PJ pedirá formalmente la presidencia provisional del Senado y presionará a la Corte Suprema para que apure una resolución sobre el reparto de los fondos coparticipables.
La decisión de los mandatarios opositores de cambiar en forma radical el actual cuadro político del país está ligada a la más que delicada situación económica y social que están atravesando sus provincias, que en algunos casos están al borde de la cesación del pagos.
“Ahora vamos por todo”, sostuvo Ruckauf ante sus colegas peronistas, varios de los cuales afrontan retrasos salariales en sus provincias (Formosa, debe tres meses a sus empleados), y ya no pueden contener el descontento social.
Por ejemplo el riojano Angel Maza, llegó a confiarles a sus colaboradores más cercanos que en algún momento analizó la posibilidad de renunciar y de pedir una intervención federal a la provincia, para que la Nación se hiciera cargo de pagar los salarios en un distrito que está en default.
“Si nos caemos nosotros, se cae todo”, fue la frase que utilizó otro mandatario para graficar el estado de ánimo en la primera línea del PJ, que buscará a partir del 10 de diciembre “gobernar directamente desde el Congreso”.
(NA). – Ante el fracaso de las negociaciones por los fondos coparticipables, los gobernadores justicialistas decidieron profundizar la pulseada con la administración de Fernando de la Rúa, que irá tomando forma a medida que se acerque el 10 de diciembre, cuando el justicialismo pasará a controlar el Congreso Nacional y reclamará la presidencia
de ambas cámaras.
La avanzada justicialista, que tendrá a los gobernadores como estrategas y a los legisladores del PJ como ejecutores de iniciativas cada vez más duras, incluye la posibilidad de iniciarle un juicio político al ministro de Economía, Domingo Cavallo, y que el Congreso pase a controlar todas las negociaciones por la deuda externa, según revelaron fuentes partidarias.
El endurecimiento de la posición de los gobernadores justicialistas, que ayer tuvo una ratificación en la decisión de Carlos Ruckauf (Buenos Aires) de retirarse de las negociaciones con la Nación, también podría derivar en la concreción de la anunciada “marcha federal”, que llegaría hasta las puertas mismas de la Casa Rosada.
Esa movilización, de concretarse, contará con el apoyo de las dos CGT, lo que indica que las centrales de Hugo Moyano y Rodolfo Daer –quienes ayer almorzaron con los gobernadores en la Casa de Salta– también formarán parte de la avanzada peronista contra el Gobierno del presidente De la Rúa.
Sin embargo, antes que De la Rúa, los gobernadores del PJ han puesto en la mira sobre Cavallo, a quien combatirán en distintos frentes, pero sobre todo en el legislativo, con iniciativas como estas:
– Impulso a una nueva ley de coparticipación de impuestos, por la cual, todos los ingresos fiscales del país tendrán que ser repartidos entre la Nación y las provincias.
– Derogación de los superpoderes que formalmente tiene el Presidente de la Nación, pero que en los hechos utiliza Cavallo.
– Adhesión e impulso al pedido del ARI de Elisa Carrió para iniciar en la Cámara de Diputados, desde el próximo martes, un proceso de juicio político a Cavallo.
– Revitalización de la Comisión Bicameral de Seguimiento de la Deuda Externa, que desde 1992 (cuando Cavallo era ministro de Carlos Menem) es monitoreada y gestionada exclusivamente por el Ministerio de Economía.
– Aprobación de la coparticipación del “impuesto al cheque”. El PJ lo hará en el Senado tras la media sanción de diputados, controlando los tiempos para que, si el Presidente la veta, el Congreso pueda recurrir al mecanismo de insistencia (dos tercios de cada cámara) sin problema de número.
Todas estas iniciativas serán sustentadas por otras de tipo institucional y judicial: el PJ pedirá formalmente la presidencia provisional del Senado y presionará a la Corte Suprema para que apure una resolución sobre el reparto de los fondos coparticipables.
La decisión de los mandatarios opositores de cambiar en forma radical el actual cuadro político del país está ligada a la más que delicada situación económica y social que están atravesando sus provincias, que en algunos casos están al borde de la cesación del pagos.
“Ahora vamos por todo”, sostuvo Ruckauf ante sus colegas peronistas, varios de los cuales afrontan retrasos salariales en sus provincias (Formosa, debe tres meses a sus empleados), y ya no pueden contener el descontento social.
Por ejemplo el riojano Angel Maza, llegó a confiarles a sus colaboradores más cercanos que en algún momento analizó la posibilidad de renunciar y de pedir una intervención federal a la provincia, para que la Nación se hiciera cargo de pagar los salarios en un distrito que está en default.
“Si nos caemos nosotros, se cae todo”, fue la frase que utilizó otro mandatario para graficar el estado de ánimo en la primera línea del PJ, que buscará a partir del 10 de diciembre “gobernar directamente desde el Congreso”.
