El FMI aún no revelará la cifra del paquete

El FMI postergó los anuncios, hasta la próxima semana, porque espera tener el acuerdo para el paquete de créditos.

14 noviembre, 2000

El Fondo Monetario Internacional dijo ayer (lunes 13) que espera tener un acuerdo por un nuevo paquete de préstamos para la Argentina a finales de la próxima semana y que recién después del anuncio revelará a cuánto ascenderá la ayuda.

El ministro de Economía, José Luis Machinea, había asegurado que el monto se conocería el miércoles de esta semana, pero según aseguraron fuentes del FMI habrá que esperar varios días más.

También se conoció ayer que tres de los mayores bancos privados de la Argentina aceptaron refinanciar más de US$ 3.200 millones de deuda doméstica a corto plazo, lo que contribuyó a quitar presión a los abultados vencimientos de servicios de deuda del gobierno.

Desde hace semanas, los mercados emergentes están preocupados por la posibilidad de que la Argentina no pueda satisfacer sus necesidades de financiamiento en el 2.001.

Los analistas consideran que el refinanciamiento forma parte de una serie de pasos adoptados por la Argentina y sus acreedores para calmar el temor de una crisis de liquidez que existe en los mercados de capitales.

“Todas las piezas de este paquete de apoyo comienzan a encajar”, dijo Tulio Vera, estratega jefe de mercados emergentes del banco Merrill Lynch.

Otro de los apoyos del mercado internacional que recibió ayer la Argentina vino del secretario del Tesoro de Estados Unidos, Lawrence Summers, quien elogió el nuevo plan económico y dijo que apoyaría un aumento de la ayuda del FMI y del Banco Mundial, lo que virtualmente asegura la aprobación del paquete (ver “EE.UU. respalda el blindaje financiero”).

Por su parte, el economista jefe del FMI, Michael Mussa, dijo que el paquete de rescate preventivo para la Argentina muestra que el organismo ha aprendido una lección valiosa de la crisis financiera de Asia: la necesidad de actuar rápida y decididamente antes de que ocurra una calamidad.

La Argentina enfrenta necesidades de fondos por unos US$ 19.500 millones el próximo año, cuando debe refinanciar el vencimiento de deudas y un déficit presupuestario de $ 6.400 millones en medio de una economía sumida en la recesión.

El Fondo Monetario Internacional dijo ayer (lunes 13) que espera tener un acuerdo por un nuevo paquete de préstamos para la Argentina a finales de la próxima semana y que recién después del anuncio revelará a cuánto ascenderá la ayuda.

El ministro de Economía, José Luis Machinea, había asegurado que el monto se conocería el miércoles de esta semana, pero según aseguraron fuentes del FMI habrá que esperar varios días más.

También se conoció ayer que tres de los mayores bancos privados de la Argentina aceptaron refinanciar más de US$ 3.200 millones de deuda doméstica a corto plazo, lo que contribuyó a quitar presión a los abultados vencimientos de servicios de deuda del gobierno.

Desde hace semanas, los mercados emergentes están preocupados por la posibilidad de que la Argentina no pueda satisfacer sus necesidades de financiamiento en el 2.001.

Los analistas consideran que el refinanciamiento forma parte de una serie de pasos adoptados por la Argentina y sus acreedores para calmar el temor de una crisis de liquidez que existe en los mercados de capitales.

“Todas las piezas de este paquete de apoyo comienzan a encajar”, dijo Tulio Vera, estratega jefe de mercados emergentes del banco Merrill Lynch.

Otro de los apoyos del mercado internacional que recibió ayer la Argentina vino del secretario del Tesoro de Estados Unidos, Lawrence Summers, quien elogió el nuevo plan económico y dijo que apoyaría un aumento de la ayuda del FMI y del Banco Mundial, lo que virtualmente asegura la aprobación del paquete (ver “EE.UU. respalda el blindaje financiero”).

Por su parte, el economista jefe del FMI, Michael Mussa, dijo que el paquete de rescate preventivo para la Argentina muestra que el organismo ha aprendido una lección valiosa de la crisis financiera de Asia: la necesidad de actuar rápida y decididamente antes de que ocurra una calamidad.

La Argentina enfrenta necesidades de fondos por unos US$ 19.500 millones el próximo año, cuando debe refinanciar el vencimiento de deudas y un déficit presupuestario de $ 6.400 millones en medio de una economía sumida en la recesión.

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