(DYN). – Urgida por la necesidad de encauzar la crisis recesiva más prolongada que vive el país, la Cámara de Diputados termina el año con un resultado récord de leyes aprobadas, entre ellas algunas de máxima importancia para el gobierno como los paquetes impositivos, la reforma laboral y un régimen de promoción para las Pymes.
El informe de la gestión legislativa que difundió la presidencia de la Cámara, a cargo de Rafael Pascual (Alianza), indica que con la llegada de la Alianza al poder, en el período extraordinario de sesiones de 1999 y en el ordinario de 2000 se votaron 162 leyes.
La cifra es superior a las 151 sanciones que en un lapso parlamentario semejante se produjo durante el segundo gobierno de Carlos Menem y contra los 127 que se computaron en un tiempo similar de la gestión de Raúl Alfonsín.
Además de las leyes sancionadas, la Cámara aprobó en el año calendario que termina 613 proyectos de resolución y 489 de declaración.
En cambio, la regulación de las prepagas, la modificación de la ley de defensa de la democracia, que eventualmente podría beneficiar a los presos por el ataque al cuartel de La Tablada, y la reforma previsional son algunos de los proyectos que quedaron “cajoneados” por falta de acuerdo político.
A último momento, se sumó el fracaso parlamentario del plan federal de infraestructura, que trabajosamente logró aprobar Diputados pero se trabó en el Senado, lo cual hizo que el gobierno se decidiera por la vía de un decreto de necesidad y urgencia para ponerlo en marcha.
(DYN). – Urgida por la necesidad de encauzar la crisis recesiva más prolongada que vive el país, la Cámara de Diputados termina el año con un resultado récord de leyes aprobadas, entre ellas algunas de máxima importancia para el gobierno como los paquetes impositivos, la reforma laboral y un régimen de promoción para las Pymes.
El informe de la gestión legislativa que difundió la presidencia de la Cámara, a cargo de Rafael Pascual (Alianza), indica que con la llegada de la Alianza al poder, en el período extraordinario de sesiones de 1999 y en el ordinario de 2000 se votaron 162 leyes.
La cifra es superior a las 151 sanciones que en un lapso parlamentario semejante se produjo durante el segundo gobierno de Carlos Menem y contra los 127 que se computaron en un tiempo similar de la gestión de Raúl Alfonsín.
Además de las leyes sancionadas, la Cámara aprobó en el año calendario que termina 613 proyectos de resolución y 489 de declaración.
En cambio, la regulación de las prepagas, la modificación de la ley de defensa de la democracia, que eventualmente podría beneficiar a los presos por el ataque al cuartel de La Tablada, y la reforma previsional son algunos de los proyectos que quedaron “cajoneados” por falta de acuerdo político.
A último momento, se sumó el fracaso parlamentario del plan federal de infraestructura, que trabajosamente logró aprobar Diputados pero se trabó en el Senado, lo cual hizo que el gobierno se decidiera por la vía de un decreto de necesidad y urgencia para ponerlo en marcha.