El agente de seguridad y custodio de la Escuela Nacional de Inteligencia (ENI) de la Secretaría de Inteligencia del Estado (SIDE) Alberto Dattoli fue condenado ayer a diez años de cárcel por el homicidio de Sofía Fijman, una mujer de 75 años que acostumbraba alimentar a los gatos que se juntaban en el jardín del edificio de la ENI. El 26 de febrero del año pasado murió aplastada por el portón metálico que el acusado accionó con el fin de asustarla, pero a sabiendas de que podía matarla. En consecuencia, los miembros del Tribunal Oral N° 29 culparon al agente de la SIDE de homicidio con dolo eventual. En su estrategia de defensa, Dattoli argumentó que se trató de un accidente, ya que al intentar levantarse, dijo, se pisó los cordones de los borceguíes, tropezó y accionó sin querer el botón que cierra el portón. Mientras que los abogados de la familia Fijman habían solicitado la pena de 18 años de prisión, la fiscalía había pedido 14 años de cárcel.
El agente de seguridad y custodio de la Escuela Nacional de Inteligencia (ENI) de la Secretaría de Inteligencia del Estado (SIDE) Alberto Dattoli fue condenado ayer a diez años de cárcel por el homicidio de Sofía Fijman, una mujer de 75 años que acostumbraba alimentar a los gatos que se juntaban en el jardín del edificio de la ENI. El 26 de febrero del año pasado murió aplastada por el portón metálico que el acusado accionó con el fin de asustarla, pero a sabiendas de que podía matarla. En consecuencia, los miembros del Tribunal Oral N° 29 culparon al agente de la SIDE de homicidio con dolo eventual. En su estrategia de defensa, Dattoli argumentó que se trató de un accidente, ya que al intentar levantarse, dijo, se pisó los cordones de los borceguíes, tropezó y accionó sin querer el botón que cierra el portón. Mientras que los abogados de la familia Fijman habían solicitado la pena de 18 años de prisión, la fiscalía había pedido 14 años de cárcel.