Irán dejó pasar el plazo impuesto por el bloque negociador (31 de agosto) sin aceptar sus planteos sobre el plan nuclear, que todavía no muestra visos bélicas. Por eso mismo, China se declaró en favor de continuar negociando, actitud compartida por Rusia. Como se sabe, las tratativas se desarrollan en el marco del consejo de Seguridad (Naciones Unidas), donde ambos países tienen derecho de veto
Los aliados europeos de Estados Unidos –Francia, Alemania, Italia, Gran Bretaña- también vacilan en cuanto a disponer sanciones. Por sí solo, Washington ya no podría imponerlas, aunque George W.Bush haya endurecido su discurso antiterrorista al acercarse las elecciones parlamentarias. Salvo Washington y Londres, el resto no cree realmente que Tehrán abrigue intenciones militares.
Este miércoles, el comisario de relaciones exteriores de la Unión Europea, el español Javier Solana, se reunía en Viena con Alí Laridyaní, negociador principal del plan nuclear y allegado al ayatollá Mohammed Jatamí. La idea es replantear las conversaciones, o sea lo mismo que sugiere Wen Jiabao, primer ministro chino.
“Aplicar sanciones no nos llevará a ninguna parte y puede ser contraproducente. Seguimos siendo partidarios –explicaba Qin Gang, vocero de la cancillería- de resolver el problema por canales diplomáticos”.
No parece casual que, en medio de esas señales, Jatamí haya salido a señalar que, si Hamás lo desea, Irán aceptará dos estados en Palestina y dejará de rechazar la existencia de Israel. En declaraciones al “Financial times”, el líder shi’í moderado sostuvo que “Hamás llegó al poder por vía democrática y me parece que está maduro para convivir con Israel, si éste reconoce sus derechos y los del gobierno palestino”.
Irán dejó pasar el plazo impuesto por el bloque negociador (31 de agosto) sin aceptar sus planteos sobre el plan nuclear, que todavía no muestra visos bélicas. Por eso mismo, China se declaró en favor de continuar negociando, actitud compartida por Rusia. Como se sabe, las tratativas se desarrollan en el marco del consejo de Seguridad (Naciones Unidas), donde ambos países tienen derecho de veto
Los aliados europeos de Estados Unidos –Francia, Alemania, Italia, Gran Bretaña- también vacilan en cuanto a disponer sanciones. Por sí solo, Washington ya no podría imponerlas, aunque George W.Bush haya endurecido su discurso antiterrorista al acercarse las elecciones parlamentarias. Salvo Washington y Londres, el resto no cree realmente que Tehrán abrigue intenciones militares.
Este miércoles, el comisario de relaciones exteriores de la Unión Europea, el español Javier Solana, se reunía en Viena con Alí Laridyaní, negociador principal del plan nuclear y allegado al ayatollá Mohammed Jatamí. La idea es replantear las conversaciones, o sea lo mismo que sugiere Wen Jiabao, primer ministro chino.
“Aplicar sanciones no nos llevará a ninguna parte y puede ser contraproducente. Seguimos siendo partidarios –explicaba Qin Gang, vocero de la cancillería- de resolver el problema por canales diplomáticos”.
No parece casual que, en medio de esas señales, Jatamí haya salido a señalar que, si Hamás lo desea, Irán aceptará dos estados en Palestina y dejará de rechazar la existencia de Israel. En declaraciones al “Financial times”, el líder shi’í moderado sostuvo que “Hamás llegó al poder por vía democrática y me parece que está maduro para convivir con Israel, si éste reconoce sus derechos y los del gobierno palestino”.