El dato del cual está pendiente el mundo entero finalmente demostró ser levemente positivo y detuvo la caída constante del crecimiento económico experimentada en los tres primeros trimestres del año. Si bien un crecimiento de casi 8% puede considerarse espectacular en otras economías, el gobierno chino sostiene que un crecimiento de por lo menos 7% es indispensable para evitar un serio aumento del desempleo en el país.
El dato positivo dado a conocer hoy da vida a las bolsas de todo el mundo y ha provocado un nuevo aumento en los precios del petróleo. Sin embargo, especialistas del mundo entero dudan de la veracidad de los datos aportados, considerando que la economía china depende en gran medida de lo que sucede en Europa y Estados Unidos, y por otra parte es esta una época de transición a un nuevo gobierno en el que el Partido Comunista necesita mostrar un poco de optimismo al pueblo chino, que ha venido sufriendo una caída en su nivel de vida mientras los funcionarios se enriquecen gracias al alto nivel de corrupción gubernamental.
“Es obvio que la caída de la actividad económica se ha detenido por el momento†comentó Fraser Howie, autor del libro Capitalismo Rojo. “Pero uno tiene que ser consciente de los límites en su alcance, debido a la cantidad de vientos en contra que está enfrentandoâ€. “Los nuevos líderes que asumirán en marzo (aunque de hecho ya están gobernando) tendrán que encontrar un balance entre prevenir la burbuja inmobiliaria y mantener un saludable crecimientoâ€.
El viceprimer ministro chino, Li Keqiang, quien en marzo asumirá como primer ministro, ha manifestado ya que la economía china se concentrará en la urbanización. La construcción de nuevas ciudades e infraestructura urbana parece ser la vieja apuesta del nuevo gobierno, aún cuando algunos especialistas consideran que es poco sustentable.