Otra encendida polémica se ha iniciado en Italia, pues un Parlamento adicto aprobó normas que pueden beneficiar al primer ministro Berlusconi, fomentando mayor concentración de medios. Una de ellas permite a políticos ser propietarios mientras ocupan cargos oficiales o electivos. Otra norma reforma el régimen de radiotelevisión, para que el mismo grupo reúna más medios.
Estas medidas parecen orientadas a consolidar la hegemonía de Mediaset, el grupo en manos de Berlusconi. Por otra parte, la privatización de la RAI se parece mucho a lo que ocurrió con las frecuencias originales de la ex radio municipal en Buenos Aires, bajo el régimen de Carlos Ménem.
En lo que puede ser un escándalo como el de las inmunidades ante dos procesos, Diputados pasó anteayer una ley para “solucionar el conflicto de intereses” entre el cargo de “premier” (presidente del Consejo) y el control de medios. Tras el retiro de la oposición –hace tiempo que ésta no atina a hacer otra cosa-, el proyecto fue aprobado por 288 contra dos.
Otra encendida polémica se ha iniciado en Italia, pues un Parlamento adicto aprobó normas que pueden beneficiar al primer ministro Berlusconi, fomentando mayor concentración de medios. Una de ellas permite a políticos ser propietarios mientras ocupan cargos oficiales o electivos. Otra norma reforma el régimen de radiotelevisión, para que el mismo grupo reúna más medios.
Estas medidas parecen orientadas a consolidar la hegemonía de Mediaset, el grupo en manos de Berlusconi. Por otra parte, la privatización de la RAI se parece mucho a lo que ocurrió con las frecuencias originales de la ex radio municipal en Buenos Aires, bajo el régimen de Carlos Ménem.
En lo que puede ser un escándalo como el de las inmunidades ante dos procesos, Diputados pasó anteayer una ley para “solucionar el conflicto de intereses” entre el cargo de “premier” (presidente del Consejo) y el control de medios. Tras el retiro de la oposición –hace tiempo que ésta no atina a hacer otra cosa-, el proyecto fue aprobado por 288 contra dos.