Ante el Financial times, Lula admitió contactos con Chávez y Bush

"Hablo mucho con él sobre la necesidad de actuar sin crear problemas para otros países", señaló Luiz Inácio da Silva (Lula). De paso, sostuvo que “Venezuela y EE.UU. se necesitan mutuamente”. Sorpresa en Washington.

12 julio, 2006

Más aún, Lula celebra el ingreso de Caracas en el Mercosur. Por otra parte, señala que el eje central de la política exterior brasileña es el vínculo con Latinoamérica.

Durante una entrevista que publica el periódico londinense –uno de los peores enemigos del canje de deuda argentino-, el mandatario también reconoció que en varias oportunidades analizó con su colega Chávez la “necesidad de proceder de manera tal que no generen problemas a terceros”. En ese contexto, llamó la atención en Washington que Lula reiterase que “Venezuela y Estados Unidos se necesitan mutuamente”.

Sobre este tema e interrogado sobre las habituales expresiones “antinorteamericanas” del venezolano, formuló otra revelación: “he discutido ese punto con Chávez y, también, con el presidente George W.Bush. Les dije que las divergencia entre ellos son peligrosas. Venezuela podría dejar de vender petróleo y generar una situación delicada para EE.UU.. Del mismo modo, Bush podría dejar de comprar hidrocarburos y provocar lo mismo. Pero fíjese usted –le recordó al periodista- que ambos siguen comprando y vendiendo”.

En otro momento, Lula abordó nuevamente los contactos con Chávez para mantener la armonía en la región. En lo tocante a la incorporación de Caracas al Mercosur, el brasileños afirmó que “representa una etapa importante en la integración regional. Venezuela tiene mucho petróleo, mucho gas y nos interesan proyectos de desarrollo estratégico para el continente”.

Lula se refería a planes para la construcción de un gasoducto de 8.000 kilómetros que unirá Venezuela, Argentina, Bolivia y Brasil. También prevé una megarefinería en el noreste brasileñol, que requerirá una inversión de US$ 2.700 millones.

Acerca de la relación bilateral con Bolivia, Lula negó tensiones por la decisión del presidente Evo Morales de nacionalizar los hidrocarburos. “Nuestra derecha conservadora –como la argentina- quería que empezáramos una guerra contra Bolivia. Preferí negociar y buscar soluciones”, aseguró el brasileño. Nunca estuve nervioso por una presunta crisis. Nos precisamos uno al otro”.

Más aún, Lula celebra el ingreso de Caracas en el Mercosur. Por otra parte, señala que el eje central de la política exterior brasileña es el vínculo con Latinoamérica.

Durante una entrevista que publica el periódico londinense –uno de los peores enemigos del canje de deuda argentino-, el mandatario también reconoció que en varias oportunidades analizó con su colega Chávez la “necesidad de proceder de manera tal que no generen problemas a terceros”. En ese contexto, llamó la atención en Washington que Lula reiterase que “Venezuela y Estados Unidos se necesitan mutuamente”.

Sobre este tema e interrogado sobre las habituales expresiones “antinorteamericanas” del venezolano, formuló otra revelación: “he discutido ese punto con Chávez y, también, con el presidente George W.Bush. Les dije que las divergencia entre ellos son peligrosas. Venezuela podría dejar de vender petróleo y generar una situación delicada para EE.UU.. Del mismo modo, Bush podría dejar de comprar hidrocarburos y provocar lo mismo. Pero fíjese usted –le recordó al periodista- que ambos siguen comprando y vendiendo”.

En otro momento, Lula abordó nuevamente los contactos con Chávez para mantener la armonía en la región. En lo tocante a la incorporación de Caracas al Mercosur, el brasileños afirmó que “representa una etapa importante en la integración regional. Venezuela tiene mucho petróleo, mucho gas y nos interesan proyectos de desarrollo estratégico para el continente”.

Lula se refería a planes para la construcción de un gasoducto de 8.000 kilómetros que unirá Venezuela, Argentina, Bolivia y Brasil. También prevé una megarefinería en el noreste brasileñol, que requerirá una inversión de US$ 2.700 millones.

Acerca de la relación bilateral con Bolivia, Lula negó tensiones por la decisión del presidente Evo Morales de nacionalizar los hidrocarburos. “Nuestra derecha conservadora –como la argentina- quería que empezáramos una guerra contra Bolivia. Preferí negociar y buscar soluciones”, aseguró el brasileño. Nunca estuve nervioso por una presunta crisis. Nos precisamos uno al otro”.

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