Aldo Pignaneli es el nuevo titular del Central

Lo decidió Eduardo Duhalde. Pignaneli era el elegido del renunciante Mario Blejer, quien le ganó la batalla a Roberto Lavagna, que desde el ministerio de Economía propiciaba la elección de Alberto Camarassa.

25 junio, 2002

Duhalde se inclinó por Pignanelli, actual vicepresidente del
Central, horas después de que Mario Blejer presentara formalmente
su dimisión al cargo, con la denuncia de haber recibido constantes
“presiones” para debilitar la independencia de la entidad.

Blejer dejó sentado su convencimiento de que evitó el “derrumbe
del sistema financiero y una explosión hiperinflacionaria”.

Duhalde, Lavagna y Pignanelli tuvieron ayer por la tarde una
extensa reunión en la Casa de Gobierno, donde también se decidió
designar como directores del Central a Jorge Alberto Levy y Félix
Alberto Camarassa.

Este último, que se desempeñó como funcionario del Banco
Mundial y como asesor del ex jefe del Gabinete Rodolfo Terragno,
era el candidato de Lavagna.

Sin embargo, Duhalde expresó que el “candidato natural” a
ocupar este estratégico cargo es Pignanelli, según informaron
voceros oficiales.

En la Casa Rosada se indicó también que Duhalde enviará al
Senado los pliegos del nuevo presidente y los dos directores de la
autoridad monetaria.

Pignanelli había asumido como director de la entidad el 10 de
octubre de 1997 y fue designado vicepresidente primero por decreto
560 del 27 de marzo pasado.

Es un funcionario salido de las filas del peronismo y mantiene
lazos fluídos con Duhalde.

Luego de la reunión entre Duhalde, Lavagna y Pignanelli, estos
dos últimos mantuvieron un encuentro a solas para analizar los
pasos a seguir en materia monetaria.

Blejer envió ayer el texto de su renuncia al presidente Eduardo
Duhalde, en la cual hace una evaluación de su gestión y justifica
su alejamiento por “motivos personales”.

En el texto, Blejer aconsejó al jefe de Estado mantener
a rajatabla la independencia de la autoridad monetaria, la cual
“se ha visto reiteradamente debilitada en los últimos tiempos”,
según dijo.

“Un punto que sin embargo debo enfatizar se relaciona con la
preservación de la independencia del BCRA, cuestión que, estoy
convencido, usted comparte plenamente”, aseguró Blejer en la carta
que también contiene su renuncia.

Explicó que “la autonomía del BCRA hace a la esencia misma de
la autoridad monetaria y es un instrumento imprescindible para
restablecer la confianza en el sistema”.

“Dado que la crisis actual es, sin duda, una crisis de
confianza, este es el momento de fortalecer la independencia de la
institución y no de someterla a presiones interesadas”, consideró
en la misiva.

En el mismo sentido, Blejer señaló: “me consta que es su
voluntad fortificar la institucionalidad como parte integral de la
solución a la crisis actual, me permito expresarle mi seguridad de
que usted tendrá este principio como rector en el momento de
designar a mi sucesor”.

Según el texto de la carta, Blejer decidió renunciar al haber
completado los objetivos que, junto con el Ejecutivo, se “trazaron
oportunamente”.

Entre las metas que menciona, se refiere a la concreción de un
programa monetario “viable” y al “encarrilamiento” en la
negociación de este plan con el Fondo Monetario Internacional.

Blejer aprovechó la ocasión para agradecerle a Duhalde por la
“confianza” que le otorgó desde el comienzo de su gestión y le
reiteró su “voluntad” de apoyar activamente la gestión
presidencial.

“A pesar de que mi titularidad en el BCRA sólo se ha extendido
por un breve período, las circunstancias a las que nos hemos visto
enfrentados han sido particularmente arduas. Aún así, creo que el
BCRA ha logrado mantener suficiente control monetario para evitar,
en medio de una corrida bancaria sin precedentes, una explosión
hiperinflacionaria, la ruptura del sistema de pagos, y hasta un
posible derrumbe total del sistema financiero”, expresó en la
carta.

Asimismo, señaló que “esto ha sido logrado en un contexto de
cambios drásticos en las reglas del juego”.

Dijo que la institución “debió, en pocos días, organizarse para
implementar políticas monetarias, bancarias y cambiarias a las que
no había debido atender durante los diez años de la
convertibilidad”.

Explicó que la entidad “debió hacer esto en un contexto de
serias dificultades para atraer personal calificado”.

“Más aún, a pesar de encontrarnos en una situación de default
soberano, se logró crear un mercado de Letras del Banco Central
que ha sido aceptado por el público y que se encuentra en franco
crecimiento”, indicó.

Por último, consideró que “todo esto puede verse como logros
parciales pero definitivamente significativos”.

Fuente: Noticias Argentinas

Duhalde se inclinó por Pignanelli, actual vicepresidente del
Central, horas después de que Mario Blejer presentara formalmente
su dimisión al cargo, con la denuncia de haber recibido constantes
“presiones” para debilitar la independencia de la entidad.

Blejer dejó sentado su convencimiento de que evitó el “derrumbe
del sistema financiero y una explosión hiperinflacionaria”.

Duhalde, Lavagna y Pignanelli tuvieron ayer por la tarde una
extensa reunión en la Casa de Gobierno, donde también se decidió
designar como directores del Central a Jorge Alberto Levy y Félix
Alberto Camarassa.

Este último, que se desempeñó como funcionario del Banco
Mundial y como asesor del ex jefe del Gabinete Rodolfo Terragno,
era el candidato de Lavagna.

Sin embargo, Duhalde expresó que el “candidato natural” a
ocupar este estratégico cargo es Pignanelli, según informaron
voceros oficiales.

En la Casa Rosada se indicó también que Duhalde enviará al
Senado los pliegos del nuevo presidente y los dos directores de la
autoridad monetaria.

Pignanelli había asumido como director de la entidad el 10 de
octubre de 1997 y fue designado vicepresidente primero por decreto
560 del 27 de marzo pasado.

Es un funcionario salido de las filas del peronismo y mantiene
lazos fluídos con Duhalde.

Luego de la reunión entre Duhalde, Lavagna y Pignanelli, estos
dos últimos mantuvieron un encuentro a solas para analizar los
pasos a seguir en materia monetaria.

Blejer envió ayer el texto de su renuncia al presidente Eduardo
Duhalde, en la cual hace una evaluación de su gestión y justifica
su alejamiento por “motivos personales”.

En el texto, Blejer aconsejó al jefe de Estado mantener
a rajatabla la independencia de la autoridad monetaria, la cual
“se ha visto reiteradamente debilitada en los últimos tiempos”,
según dijo.

“Un punto que sin embargo debo enfatizar se relaciona con la
preservación de la independencia del BCRA, cuestión que, estoy
convencido, usted comparte plenamente”, aseguró Blejer en la carta
que también contiene su renuncia.

Explicó que “la autonomía del BCRA hace a la esencia misma de
la autoridad monetaria y es un instrumento imprescindible para
restablecer la confianza en el sistema”.

“Dado que la crisis actual es, sin duda, una crisis de
confianza, este es el momento de fortalecer la independencia de la
institución y no de someterla a presiones interesadas”, consideró
en la misiva.

En el mismo sentido, Blejer señaló: “me consta que es su
voluntad fortificar la institucionalidad como parte integral de la
solución a la crisis actual, me permito expresarle mi seguridad de
que usted tendrá este principio como rector en el momento de
designar a mi sucesor”.

Según el texto de la carta, Blejer decidió renunciar al haber
completado los objetivos que, junto con el Ejecutivo, se “trazaron
oportunamente”.

Entre las metas que menciona, se refiere a la concreción de un
programa monetario “viable” y al “encarrilamiento” en la
negociación de este plan con el Fondo Monetario Internacional.

Blejer aprovechó la ocasión para agradecerle a Duhalde por la
“confianza” que le otorgó desde el comienzo de su gestión y le
reiteró su “voluntad” de apoyar activamente la gestión
presidencial.

“A pesar de que mi titularidad en el BCRA sólo se ha extendido
por un breve período, las circunstancias a las que nos hemos visto
enfrentados han sido particularmente arduas. Aún así, creo que el
BCRA ha logrado mantener suficiente control monetario para evitar,
en medio de una corrida bancaria sin precedentes, una explosión
hiperinflacionaria, la ruptura del sistema de pagos, y hasta un
posible derrumbe total del sistema financiero”, expresó en la
carta.

Asimismo, señaló que “esto ha sido logrado en un contexto de
cambios drásticos en las reglas del juego”.

Dijo que la institución “debió, en pocos días, organizarse para
implementar políticas monetarias, bancarias y cambiarias a las que
no había debido atender durante los diez años de la
convertibilidad”.

Explicó que la entidad “debió hacer esto en un contexto de
serias dificultades para atraer personal calificado”.

“Más aún, a pesar de encontrarnos en una situación de default
soberano, se logró crear un mercado de Letras del Banco Central
que ha sido aceptado por el público y que se encuentra en franco
crecimiento”, indicó.

Por último, consideró que “todo esto puede verse como logros
parciales pero definitivamente significativos”.

Fuente: Noticias Argentinas

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