<p>No obstante, Jean-Claude Trichet retrasa a julio la próxima alza del tipo referencial y lo deja en 1,25% anual. Tanta cautela afecta al euro, ya presionado por el riesgo de que Atenas lo abandone. El primer ministro Yioryios Papandréu sostiene que son maniobras de especuladores.<br />
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Pero el viernes hubo una reunión urgente y borrascosa, en Luxemburgo, entre Alemania y Francia, los principales acreedores de Grecia. Fuentes allegadas al Eurogrupo (ministros de hacienda de la zona), en particular su presidente Jean-Claude Juncker, saben de un dramático pedido heleno para salir de la Eurozona. Obviamente, los nuevos sacrificios que se demandan a Atenas (y Lisboa) pueden romper el cáliz.<br />
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El motivo de ambos es claro: deberán gestionar ante acreedores intransigentes nuevas inyecciones de crédito de ahora a 2013. Si en realidad los catorce -Eurozona menos Grecia, Portugal e Irlanda- ven con inquietud el peligro de quedarse sin dos miembros. Tienen una sola salida: unirse al Fondo Monetario Internacional y, juntos- declarar su disposición a prestar más fondos.<br />
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Esta perspectiva dista de ser fácil, particularmente en Alemania, cuyo electorado quisiera ver fuera del euro a Atenas y Lisboa, por lo menos. Angela Merkel afronta un cabildeo parlamentario en ese sentido, fogoneado por Alex Weber. No es poco cosa: era hasta hace poco el candidato de Berlín para suceder en noviembre a Trichet en el BCE.<br />
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Pero este econometrista abandonó el Bundesbank y se pasó a quienes propugnan el doble euro: uno para economías prósperas, otro para las rezagadas. El primer grupo lo lidera Alemania y lo componen Austria, Holanda, los escandinavos y Luxemburgo. El resto lo encabeza Francia. Naturalmente, esto desvirtuaría los debates en tornos de Grecia y Portugal; aparte ¿dónde figurarían los diez países de la Unión Europea sin moneda común? <br />
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Ahora, Merkel quiere a Draghi en el Fondo
Según Der Spiegel, la canciller alemana propondrá a Mario Draghi. Pero no para jefe del Banco Central Europeo, sino como director gerente del FMI. Mientras, rumores sobre Grecia fuera del euro lo hacen caer de US$ 1,485 a 1,435 en apenas dos días.