Aerolíneas: embargo de aviones

La aerolínea sufrió el embargo de 32 aviones por una presunta deuda con la DGI. Continúan las discusiones por el plan de salvataje.

11 mayo, 2000

Aerolíneas Argentinas no se encuentra en su etapa más brillante. A las discusiones y conflictos en torno al plan de salvataje, se sumó un embargo judicial sobre 32 aviones (29 de Aerolíneas y tres de Austral), por una supuesta deuda impositiva.

La DGI acusó a la compañía de no efectuar las retenciones en ganancias que correspondían a la renta generada por el sistema informático Amadeus –que permite la reserva de pasajes, hoteles y autos desde cualquier lugar del mundo–.

Según el organismo recaudador, la renta percibida por un prestador del exterior – Amadeus tiene origen en España y sede en Alemania –debe considerarse en su totalidad de fuente argentina y, por lo tanto, Aerolíneas debería haber realizado las correspondientes retenciones por ganancias. La empresa sostiene que Amadeus debe pagar en su país de origen.

Entre tanto, continúa el conflicto por el salvataje de la empresa que se encuentra en una muy difícil situación. El Jefe de Gabinete, Rodolfo Terragno, expresó sus objetivos al respecto: “hay que sanearla y hacerla rentable”. La SEPI comunicó que la iniciativa de rescate será presentada en los próximos días.

Los empleados de la empresa –que tienen una participación de 10%– elevaron una solicitud al rey de España para que defienda los 15.000 puestos de trabajo que dependen de Aerolíneas y anunciaron que no adoptarán medidas de fuerza hasta que la SEPI difunda su plan.
Los sindicatos recordaron que la privatización fue inadecuada porque el Estado no exigió las inversiones necesarias.

Aerolíneas Argentinas no se encuentra en su etapa más brillante. A las discusiones y conflictos en torno al plan de salvataje, se sumó un embargo judicial sobre 32 aviones (29 de Aerolíneas y tres de Austral), por una supuesta deuda impositiva.

La DGI acusó a la compañía de no efectuar las retenciones en ganancias que correspondían a la renta generada por el sistema informático Amadeus –que permite la reserva de pasajes, hoteles y autos desde cualquier lugar del mundo–.

Según el organismo recaudador, la renta percibida por un prestador del exterior – Amadeus tiene origen en España y sede en Alemania –debe considerarse en su totalidad de fuente argentina y, por lo tanto, Aerolíneas debería haber realizado las correspondientes retenciones por ganancias. La empresa sostiene que Amadeus debe pagar en su país de origen.

Entre tanto, continúa el conflicto por el salvataje de la empresa que se encuentra en una muy difícil situación. El Jefe de Gabinete, Rodolfo Terragno, expresó sus objetivos al respecto: “hay que sanearla y hacerla rentable”. La SEPI comunicó que la iniciativa de rescate será presentada en los próximos días.

Los empleados de la empresa –que tienen una participación de 10%– elevaron una solicitud al rey de España para que defienda los 15.000 puestos de trabajo que dependen de Aerolíneas y anunciaron que no adoptarán medidas de fuerza hasta que la SEPI difunda su plan.
Los sindicatos recordaron que la privatización fue inadecuada porque el Estado no exigió las inversiones necesarias.

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