jueves, 26 de diciembre de 2024

Volkswagen cree en la Argentina

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A pesar de la difícil situación económica del país, el presidente de la filial local del fabricante alemán optará por acrecentar la presencia del grupo en el país para no resignar su liderazgo.

(EFE).- Viktor Klima, presidente de Volkswagen Argentina desde hace casi seis meses y anterior canciller federal austríaco, se ha propuesto fortalecer la presencia de su empresa en el país, pese a la situación económica adversa que atraviesa.

Así lo explica en una entrevista publicada hoy (viernes 9) por el diario Kurier de Viena, en la que anuncia que el Golf, el modelo de automóvil más vendido en la Argentina, se seguirá fabricando hasta 2006, aunque se ve en la necesidad de planear un sucesor más barato de este coche, en vista de la fuerte presión de la competencia.

Klima, que antes de ser jefe del Gobierno austríaco formaba parte de la dirección del grupo industrial más importante de Austria, el cártel petrolero OMV, atribuye el hecho de que VW Argentina esté en números rojos a errores cometidos por la dirección anterior de la empresa, así como a la situación económica del país.

La sujeción del peso argentino a la cotización del dólar, introducida en 1991 para combatir la inflación, se ha convertido en una condición demasiado exigente para la economía nacional, más aún desde la devaluación de la moneda brasileña en 1999, opina Klima.

Para VW, a pesar de todo, hay motivos para no querer cerrar las plantas argentinas, ya que la empresa no podría mantenerse como líder del mercado debido a la aduana de 35% en los automóviles importados.

Por otra parte, para VW es mejor repartir los riesgos económicos de la empresa entre varios países y no tener a Brasil como base única en América latina, destaca el presidente, que afirma haber conseguido ya aumentos de producción.

El programa encaminado a aumentar la competitividad de VW Argentina prevé reducir los gastos de financiación y de material, lo último a través de duras negociaciones con los suministradores.

Gracias a un acuerdo con los sindicatos, la empresa ha podido reducir los costos del personal en 25% mediante jubilaciones anticipadas y un modelo de horario de cuatro días que sigue el ejemplo alemán.

Klima, que asegura no querer contribuir al paro en la Argentina, está convencido de que la plantilla sigue motivada y cree en el futuro de sus empleos.

La nueva planta de cajas de cambio en Córdoba, a donde se trasladan trabajadores de la fábrica de Pacheco, situada cerca de Buenos Aires, será inaugurada a finales de agosto por el canciller federal alemán, Gerhard Schroeder, amigo personal de Klima.

Como objetivos de la empresa, el presidente de VW Argentina señala reducir la dependencia del mercado interno argentino al igual que de Brasil, comprador más importante de automóviles argentinos.

Por ello pretende exportar también a México y ha acordado ya con ese país la adquisición de más de 10.000 vehículos para este año, alternativa que se abrió con la reducción de la tarifa de aduana mexicana con la Argentina, de 20% a 8%.

El presidente de VW Argentina, que se ha fijado el objetivo de obtener ganancias en 2002, afirma que no piensa en el futuro, cuando haya expirado su contrato de cinco años con la empresa, ya que procura cumplir lo mejor posible en el lugar donde se encuentre.

(EFE).- Viktor Klima, presidente de Volkswagen Argentina desde hace casi seis meses y anterior canciller federal austríaco, se ha propuesto fortalecer la presencia de su empresa en el país, pese a la situación económica adversa que atraviesa.

Así lo explica en una entrevista publicada hoy (viernes 9) por el diario Kurier de Viena, en la que anuncia que el Golf, el modelo de automóvil más vendido en la Argentina, se seguirá fabricando hasta 2006, aunque se ve en la necesidad de planear un sucesor más barato de este coche, en vista de la fuerte presión de la competencia.

Klima, que antes de ser jefe del Gobierno austríaco formaba parte de la dirección del grupo industrial más importante de Austria, el cártel petrolero OMV, atribuye el hecho de que VW Argentina esté en números rojos a errores cometidos por la dirección anterior de la empresa, así como a la situación económica del país.

La sujeción del peso argentino a la cotización del dólar, introducida en 1991 para combatir la inflación, se ha convertido en una condición demasiado exigente para la economía nacional, más aún desde la devaluación de la moneda brasileña en 1999, opina Klima.

Para VW, a pesar de todo, hay motivos para no querer cerrar las plantas argentinas, ya que la empresa no podría mantenerse como líder del mercado debido a la aduana de 35% en los automóviles importados.

Por otra parte, para VW es mejor repartir los riesgos económicos de la empresa entre varios países y no tener a Brasil como base única en América latina, destaca el presidente, que afirma haber conseguido ya aumentos de producción.

El programa encaminado a aumentar la competitividad de VW Argentina prevé reducir los gastos de financiación y de material, lo último a través de duras negociaciones con los suministradores.

Gracias a un acuerdo con los sindicatos, la empresa ha podido reducir los costos del personal en 25% mediante jubilaciones anticipadas y un modelo de horario de cuatro días que sigue el ejemplo alemán.

Klima, que asegura no querer contribuir al paro en la Argentina, está convencido de que la plantilla sigue motivada y cree en el futuro de sus empleos.

La nueva planta de cajas de cambio en Córdoba, a donde se trasladan trabajadores de la fábrica de Pacheco, situada cerca de Buenos Aires, será inaugurada a finales de agosto por el canciller federal alemán, Gerhard Schroeder, amigo personal de Klima.

Como objetivos de la empresa, el presidente de VW Argentina señala reducir la dependencia del mercado interno argentino al igual que de Brasil, comprador más importante de automóviles argentinos.

Por ello pretende exportar también a México y ha acordado ya con ese país la adquisición de más de 10.000 vehículos para este año, alternativa que se abrió con la reducción de la tarifa de aduana mexicana con la Argentina, de 20% a 8%.

El presidente de VW Argentina, que se ha fijado el objetivo de obtener ganancias en 2002, afirma que no piensa en el futuro, cuando haya expirado su contrato de cinco años con la empresa, ya que procura cumplir lo mejor posible en el lugar donde se encuentre.

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