Los recortes incluyen 950 agentes que atendían a inversores individuales, setenta en el área bursátil global –incluye servicios a inversores institucionales- y cien en investigación de mercados. Estos datos provienen directamente del mercado o de personal despedido.
En los últimos dieciocho meses, Morgan Stanley ha ido reduciendo la dotación de 62.700 a 57.800 (7,8%). En la presente fase, las prescindencias –como en otras firmas y bancas- reflejan la caída en ofertas públicas iniciales (OPI) de acciones y la menor emisión de deuda por parte de las empresas. Ambas categorías y la banca de inversión han cedido a mínimos desde 1996. Desde principios de 2001, el sector ha despedido más de 60.000 profesionales. “No son buenos tiempos para el negocio de valores. Los mercados están volátiles, los CEO evitan fusiones, los inversores institucionales no acuden a las OPI y el público es renuente a operar”. Así definía el clima Sanford Bernstein, ex ejecutivo de MS, hoy director financiero de Lehman Brothers Holdings.
Los recortes incluyen 950 agentes que atendían a inversores individuales, setenta en el área bursátil global –incluye servicios a inversores institucionales- y cien en investigación de mercados. Estos datos provienen directamente del mercado o de personal despedido.
En los últimos dieciocho meses, Morgan Stanley ha ido reduciendo la dotación de 62.700 a 57.800 (7,8%). En la presente fase, las prescindencias –como en otras firmas y bancas- reflejan la caída en ofertas públicas iniciales (OPI) de acciones y la menor emisión de deuda por parte de las empresas. Ambas categorías y la banca de inversión han cedido a mínimos desde 1996. Desde principios de 2001, el sector ha despedido más de 60.000 profesionales. “No son buenos tiempos para el negocio de valores. Los mercados están volátiles, los CEO evitan fusiones, los inversores institucionales no acuden a las OPI y el público es renuente a operar”. Así definía el clima Sanford Bernstein, ex ejecutivo de MS, hoy director financiero de Lehman Brothers Holdings.