De acuerdo a los informes vertidos por diversas consultoras, la Argentina comenzará a ver algunos síntomas de reactivación en el segundo semestre del año en curso, pero recién en el 2001 la economía alcanzará los niveles que tenía en el segundo trimestre de 1998.
Según las estimaciones realizadas, el PBI crecerá 2,5%, un punto y medio menos de lo que se tenía estimado. La causa, es la prolongada retracción del consumo.
En el marco de las dificultades que se presentan, comienzan a elevarse voces que señalan la imposibilidad de cumplir con las metas pautadas con el FMI. De darse este escenario, la mayoría de las consultoras no consideran que esto provoque grandes cambios, ni en el Fondo ni en los inversores: “lo más probable es que el Fondo perdone un desvío” —dijo Camilo Tiscornia del estudio Ferreres—.
Por su parte, Hernán Lacunza de la Fundación Capital aseguró que en el caso de no cumplirse con las metas pautadas, no pasará nada porque “el Fondo no tendrá argumentos para exigir más esfuerzo”.
Los economistas del CEMA y de Econométrica coincidieron al señalar que no se producirán sobresaltos en el mercado porque éste ya tiene incorporada la posibilidad de que las metas no puedan cumplimentarse. La mayoría de las consultoras señalaron que el ajuste planteado por el gobierno era necesario.
De acuerdo a los informes vertidos por diversas consultoras, la Argentina comenzará a ver algunos síntomas de reactivación en el segundo semestre del año en curso, pero recién en el 2001 la economía alcanzará los niveles que tenía en el segundo trimestre de 1998.
Según las estimaciones realizadas, el PBI crecerá 2,5%, un punto y medio menos de lo que se tenía estimado. La causa, es la prolongada retracción del consumo.
En el marco de las dificultades que se presentan, comienzan a elevarse voces que señalan la imposibilidad de cumplir con las metas pautadas con el FMI. De darse este escenario, la mayoría de las consultoras no consideran que esto provoque grandes cambios, ni en el Fondo ni en los inversores: “lo más probable es que el Fondo perdone un desvío” —dijo Camilo Tiscornia del estudio Ferreres—.
Por su parte, Hernán Lacunza de la Fundación Capital aseguró que en el caso de no cumplirse con las metas pautadas, no pasará nada porque “el Fondo no tendrá argumentos para exigir más esfuerzo”.
Los economistas del CEMA y de Econométrica coincidieron al señalar que no se producirán sobresaltos en el mercado porque éste ya tiene incorporada la posibilidad de que las metas no puedan cumplimentarse. La mayoría de las consultoras señalaron que el ajuste planteado por el gobierno era necesario.