El Fondo Monetario Internacional impuso un compás de espera para la firma del blindaje financiero; hasta que el presupuesto reciba sanción definitiva del Congreso .
Los cambios que los senadores introdujeron al proyecto original, enojaron al ministro José Luis Machinea, que los calificó de “demagógicos”, y a la misión del FMI, que quiere saber el impacto que tendrán estas modificaciones sobre las metas del programa que se firmará por tres años.
De acuerdo a la información que trascendió al finalizar la reunión que ,anoche (jueves 7), mantuvieron Ter- Minassian y Machinea, se le solicitará a los diputados que vuelvan a fojas cero algunas de las modificaciones impuesta por la Cámara alta.
Los cambios bajo análisis se refieren a la marcha atrás con el recorte salarial de los empleados públicos y con la baja de los subsidios a los combustibles en la Patagonia.
También está cuestionado el gasto de $ 20 millones que supondrá el nuevo aporte para financiar los partidos políticos.
La aprobación del presupuesto 2001 con modificaciones en el Senado, ayer por la tarde, creó nuevas tensiones internas en el seno de la Alianza “sobre todo porque muchos de los cambios surgieron de la tropa propia”, confesaron cerca de Machinea.
Con esta postergación, el directorio del Fondo recién aprobaría el blindaje en enero próximo, comentaron al diario La Nación fuentes del organismo de crédito desde Washington.
La fuente del FMI consideró, que aunque el directorio no trate el acuerdo con la Argentina este año, el anuncio de la carta de intención y del monto de la ayuda bastarían para revertir las expectativas negativas actuales de los mercados de capitales respecto del país.
La letra final del acuerdo se negociaría por vía telefónica o con un nuevo viaje de Mario Vicens a Washington, ya que Teresa Ter-Minassian dejaría Buenos Aires antes del lunes próximo.
El Fondo Monetario Internacional impuso un compás de espera para la firma del blindaje financiero; hasta que el presupuesto reciba sanción definitiva del Congreso .
Los cambios que los senadores introdujeron al proyecto original, enojaron al ministro José Luis Machinea, que los calificó de “demagógicos”, y a la misión del FMI, que quiere saber el impacto que tendrán estas modificaciones sobre las metas del programa que se firmará por tres años.
De acuerdo a la información que trascendió al finalizar la reunión que ,anoche (jueves 7), mantuvieron Ter- Minassian y Machinea, se le solicitará a los diputados que vuelvan a fojas cero algunas de las modificaciones impuesta por la Cámara alta.
Los cambios bajo análisis se refieren a la marcha atrás con el recorte salarial de los empleados públicos y con la baja de los subsidios a los combustibles en la Patagonia.
También está cuestionado el gasto de $ 20 millones que supondrá el nuevo aporte para financiar los partidos políticos.
La aprobación del presupuesto 2001 con modificaciones en el Senado, ayer por la tarde, creó nuevas tensiones internas en el seno de la Alianza “sobre todo porque muchos de los cambios surgieron de la tropa propia”, confesaron cerca de Machinea.
Con esta postergación, el directorio del Fondo recién aprobaría el blindaje en enero próximo, comentaron al diario La Nación fuentes del organismo de crédito desde Washington.
La fuente del FMI consideró, que aunque el directorio no trate el acuerdo con la Argentina este año, el anuncio de la carta de intención y del monto de la ayuda bastarían para revertir las expectativas negativas actuales de los mercados de capitales respecto del país.
La letra final del acuerdo se negociaría por vía telefónica o con un nuevo viaje de Mario Vicens a Washington, ya que Teresa Ter-Minassian dejaría Buenos Aires antes del lunes próximo.
