(EFE).- La compañía británica de telecomunicaciones British Telecom (BT) confirmó ayer su interés por entrar en el mercado de la televisión por cable como parte de su programa de reestructuración.
El grupo, dirigido por el ex presidente de la BBC Christopher Bland, quiere usar su extensa red de cable telefónico para llevar a los hogares del Reino Unido programas televisivos y contenidos de Internet.
BT tenía prohibida la teledifusión desde su privatización en 1984, aunque la traba legal expiró el pasado enero y el grupo posee ahora libertad de movimiento para explorar ese mercado.
“Hemos tenido prohibido el acceso a la retransmisión televisiva, pero estudiaremos que posibilidades hay en ese campo”, confirmó un portavoz del gigante de las telecomunicaciones.
De entrar en ese mercado, BT sería una amenaza para NTL y Telewest -los dos operadores que han instalado cable de fibra óptica en todo el país y prestan sus propios servicios- porque toda casa que disponga de una línea telefónica podría acceder a su servicio.
British Telecom podría también buscar una alianza con grupos mediáticos como BSkyB, Granada Media o OnDigital para que aporten los contenidos.
El interés de la compañía responde al plan de reestructuración impulsado por Bland a comienzos de este mes para reducir la abultada deuda de la firma, que asciende a US$ 40.000 millones.
El gigante británico de las telecomunicaciones tiene previsto dividirse en dos compañías y ya ha hecho una oferta de acciones sin precedentes en un intento por recuperar la confianza de los accionistas.
Para recortar dicha deuda, BT confirmó este sábado que ha vendido su empresa Yell (“Páginas Amarillas”) a dos firmas de inversión de capital -la británica Apax Partners y la estadounidense Hicks, Muse, Tate & Furst- por unos US$ 2.959 millones.
(EFE).- La compañía británica de telecomunicaciones British Telecom (BT) confirmó ayer su interés por entrar en el mercado de la televisión por cable como parte de su programa de reestructuración.
El grupo, dirigido por el ex presidente de la BBC Christopher Bland, quiere usar su extensa red de cable telefónico para llevar a los hogares del Reino Unido programas televisivos y contenidos de Internet.
BT tenía prohibida la teledifusión desde su privatización en 1984, aunque la traba legal expiró el pasado enero y el grupo posee ahora libertad de movimiento para explorar ese mercado.
“Hemos tenido prohibido el acceso a la retransmisión televisiva, pero estudiaremos que posibilidades hay en ese campo”, confirmó un portavoz del gigante de las telecomunicaciones.
De entrar en ese mercado, BT sería una amenaza para NTL y Telewest -los dos operadores que han instalado cable de fibra óptica en todo el país y prestan sus propios servicios- porque toda casa que disponga de una línea telefónica podría acceder a su servicio.
British Telecom podría también buscar una alianza con grupos mediáticos como BSkyB, Granada Media o OnDigital para que aporten los contenidos.
El interés de la compañía responde al plan de reestructuración impulsado por Bland a comienzos de este mes para reducir la abultada deuda de la firma, que asciende a US$ 40.000 millones.
El gigante británico de las telecomunicaciones tiene previsto dividirse en dos compañías y ya ha hecho una oferta de acciones sin precedentes en un intento por recuperar la confianza de los accionistas.
Para recortar dicha deuda, BT confirmó este sábado que ha vendido su empresa Yell (“Páginas Amarillas”) a dos firmas de inversión de capital -la británica Apax Partners y la estadounidense Hicks, Muse, Tate & Furst- por unos US$ 2.959 millones.