<p>La <em>London Inter Bank Offered Rate</em> (Libor) se calcula a partir de tipos pagados por dieciséis bancos de primera línea. Se usa para calcular intereses sobre una amplia gama de préstamos y sus actuales tendencias erráticas preocupan inclusive fuera de círculos banqueros.</p>
<p>Por ejemplo, el <em>Wall Street Journal</em> comparó costos informados por ese grupo contra un parámetro que también mide riesgos activos y pasivos: los pases sobre créditos en insolvencia, una forma de reaseguro contra ceses de pagos no soberanos. La investigación reveló que Citigroup, Union des Banques Suisses, JP Morgan Chase, HBOS (británico) y WestLandesBank (alemán) declaraban costos pasivos inferiores a los que podían deducirse de los pases.</p>
<p>Eso significa que, según la Libor, “el sistema bancario andaba mejor de lo que presuponían otros parámetros en momentos de crisis financieras”, apunta el trabajo. Por ende, “la disparidad puede poner en duda bases empleadas para calcular hipotecas, préstamos al sector privado y una pila de transacciones en una larga serie de mercados especulativos.</p>
<p>Algunos bancos del sistema sospechan que sus rivales subestiman sus costos pasivos para no dar mala imagen. Presionada, la Asociación Británica de Banqueros, trató el tema hace algunos días, pero sin hacer cambios de relieve, ignorando una anomalía potencialmente peligrosa.</p>
<p>En realidad, las Libor y las tasas sobre pases en insolvencia vienen divergiendo desde enero. Justo cuando las turbulencias financieras se agravaban y los principales bancos centrales de Occidente se habían lanzado a frenar la crisis. Pese a todo, la ABB cree que el sistema Libor es fiable y recuerda que, en tiempos de crisis, “varios indicadores financieros se comportan en forma errática”. Mal de muchos, consuelo de ortodoxos.</p>
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Libor: los misterios de una tasa que no ya es lo que era
Más que tantas anteriores, la crisis de liquidez 2007/8 (¿quizá /9?) expone defectos sistémicos, particularmente en los mercado occidentales. Por ende, la Libor es hoy objeto de una revisión poco ostensible.