En general, los analistas no atribuyen lo sucedido esta semana al “optimismo mundial por la recuperación económica”, como sostenían los sauditas en Viena durante la reunión de la OPEP. “El desinfle del dólar –señalaban en el mercado neoyorquino de futuros- fuerza una demanda de materias primas para cubrirse de la inflación”. <br />
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En mayo, pues, el indicador Reuters/Jefferies CRB (diecinueve combustibles, metales y rubros agropecuarios) avanzó 14%. Es el mayor margen desde julio de 1974. Entretanto, el dólar marcaba la caída mensual más amplia desde agosto de 2008 contra una canasta de seis monedas (euro, yüan, yen, esterlina, franco suizo, corona sueca). <br />
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Esta combinación de dólar débil y síntomas inflacionarios –o estanflacionarios- provoca una demanda oportunista de crudos, metales críticos, oro, granos y oleaginosas. A los precios señalados, los hidrocarburos logran el mayor aumento mensual en diez años y las naftas saltan más de 30% en el mes (por reducción de existencias en Estados Unidos). Oro, maíz y porotos de soja tocaron el viernes el pico desde septiembre. <br />
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El índice CRB gana 1,1% a 252,62, máximo desde noviembre. El dólar completa tres meses de retroceso con reacciones esporádicas y, por tanto, inversores y especuladores buscan refugios no monetarios. <br />
Crudos e insumos viven el mayor repunte desde 1974
El petróleo centra la atención con valores de US$ 64,50 a 66,10 el barril (Brent, WTI). Pero, en general, los principales productos primarios marchan al alza más pronunciada desde hace 35 años, influida por un dólar en apenas 0,71 o 1,41 por euro.