<p>Nadie fue tomado de sorpresa: la participación del electorado fue aún menos que en los comicios anteriores y eso perjudicó a las izquierdas moderadas (por ejemplo, la española). Nuevamente, más de 52% del padrón se abstuvo, revelando que crece la desconfianza respecto de las dirigencias. En general, los analistas estiman que esto es un golpe de gracia al proyecto de tratado constitucional.<br />
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Asediada por las propuestas xenófobas –Holanda, Italia, España, Francia. Austria-, la construcción política de la Unión Europea pierde sostén y se torna ilusoria. Máximo en medio de una crisis sistémica que parece aflojar en Estados Unidos, aunque no en la UE: un desempleo medio de 9,4% en la Eurozona (abril) juega en favor de partidos identificados con la defensa de la mano de obra local contra los inmigrantes.<br />
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Berlusconi intentó, a última hora, mejorar sus posibilidades calificando a Milán –la mayor ciudad italiana- de “virtualmente africanizada”. No obstante, problemas judiciales y escándalos lo hicieron descender de 38 a 35%. Pero el colapso de los socialdemócratas les impidió aprovechar la circunstancia. Resultado: triunfo de los separatistas y xenófobos de Umberto Bossi (Liga Norteña).<br />
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En Alemania, los democristianos de la canciller Merkel obtuvieron 38% y sus aliados socialdemócratas lograron lo impensado: caer a apenas 20%. Esto significa que la “grosse koalition” puede deshacerse con vistas a las elecciones germanas de septiembre. En Francia, los socialistas (15,8%) y centristas de derrumban, los verdes saltan a 16,8% y Sarkozy logra 33%.<br />
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Sea como fuere, ahora la UE deberá replantear seriamente un esquema político de hecho inexistente. El perfil derechista del parlamento entrante, donde pesarán grupos xenófobos, también afectará el funcionamiento económico colectivo. En este plano, hay un contrate entre la ejecutividad de la comisión de Bruselas y la palidez del Banco Central Europeo.<br />
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En Gran Bretaña, las proyecciones iniciales son malas para Brown. Los laboristas obtienen menos de 16% (23% en 2004), piso histórico, en tanto el partido de la Independencia supera 18% y los conservadores retienen 15%. Pero el primer ministro, abandonado por medio gabinete, se resiste a renunciar.</p>
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En las euroelecciones: el tema es la baja afluencia
El desencanto facilitó el avance de la derecha y aun de sus extremos. Angela Merkel ganó en Alemania no sus aliados-, Nicolas Sarkozy y Silvio Berlusconi en Italia (pero por menor margen). Gordon Brown ya no tiene resto en Gran Bretaña.