<p>La propuesta impositiva se incluye en el proyecto general en proceso de debate y enmiendas senatoriales, vía el comité de finanzas cuyo veredicto se espera en estos días. Después, el paquete íntegro va a tablas en ambas cámaras. <br />
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Pesos pesados de la industria local, entre ellos Boston Scientific o Covidien, operan sobre muchos legisladores para eliminar la parte tributaria del proyecto que auspicia el senador Max Baucus (demócrata, Montana), jefe del comité. Las empresas arguyen que tributar unos US$ 400 millones anuales puede desfinanciar investigación y desarrollo en un sector que agrupa 225 firmas y emplea unas 20.000 personas sólo en Massachusetts.<br />
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Paul Donovan, vicepresidente de <em>Boston Scientific</em>, sostiene que “los efectos de un impuesto así serán terribles”. A su criterio, “Washington ha estado alentando a crear más puestos profesionales con altos sueldos. Pero este proyecto puede frustrarlos y deteriorar la calidad en I&D”. En realidad, Baucus calcula recaudar unos US$ 4.000 millones anuales entre fabricantes de insumos médicos, o sea diez veces el monto que asusta en Massachusetts. <br />
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Por su parte, la mayoría de los legisladores demócratas que apoya la ley en ciernes subraya un punto omitido por los “lobbies”. Se trata de “actividades –indica Baucus- que se beneficiarán con la ampliación de las prestaciones médicas a 46 millones de norteamericanos hoy sin cobertura”. <br />
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De acuerdo con Linda Blumberg –preside el Urban Institute, un grupo no partidario de Washington-, “siempre hay gente e intereses dispuestos a trabar cualquier propuesta que implique elevar la recaudación. Pero eso no significa que se trate de malos proyectos. Sin duda, será imposible mejorar la calidad de las prestaciones médicas sin financiarla”.</p>
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Impuestos a insumos médicos, una nueva fuente de presiones
Al menos en Massachusetts, sostienen que el financiamiento del futuro seguro médico universal creará desempleo. La gente del negocio ya estima tributar US$ 400 millones anuales al fisco, en desmedro de gastos laborales e investigación científica.
