<p>Flame, así bautizaron al malware más complejo del mundo que atacó la seguridad de Irán, Rusia y Hungría hace dos semanas. Durante dos años “Flame” se dedicó a copiar documentos y grabar archivos de audio y monitorear el tráfico de red, las llamadas en Skype y capturar las pantallas de empleados de estos Estados. Esa información después era enviada a los servidores de sus creadores, sin que el sistema antivirus alerte a las autoridades para tomar acción. Los sistemas antivirus fallaron, entonces, en la detección.</p>
<p>Pero Flame es solo el último en una serie de incidentes que hablan a las claras de que el software antivirus tradicional ha quedado obsoleto para combatir al malware. Los programas en empresas y entidades estatales funcionan como un antivirus casero: las amenazas son detectadas cuando el programa detecta rastros de malware, de ahí la importancia de las actualizaciones.</p>
<p>En los últimos años ataques a Irán pero también a Estados Unidos han probado que este sistema no es tan efectivo. Empresas como Google y RSA, gigantes de la tecnología, también fueron atacadas en busca de secretos corporativos. De ahí la necesidad de una nueva solución, superadora de los programas antivirus.</p>
<p>Algunas startups están trabajando en eso. Quieren cambiar el foco, de las herramientas a los criminales que están detrás de ellas. La idea de empresas como CrowdStrike, fundada por veteranos de la industria antivirus y que recibió inversiones por US$ 26 millones, es poner el foco en las tácticas y en el elemento humano detrás de los ataques. Sus fundadores dicen que, aunque la manera de atacar puede cambiar, el objetivo es siempre el mismo: acceder a información valiosa. Tiene sentido porque los ataques raramente son responsabilidad de una persona sino de un grupo. Entonces las consultoras de seguridad necesitan crear equipos, también, para contrarrestar sus efectos.</p>
<p>Otra startup, Shape Security, se enfocará en el costo económico de atacar a empresas. Con una financiación de US$ 6 millones del ex CEO de Google Eric Schmidt planean crear barreras que hagan costoso, y por lo tanto inviable, el ataque. Para Shape Security “el crimen paga”. Sigue los pasos de Mykonos Software quienes crearon una tecnología para proteger páginas web que consume el tiempo de los hackers para atacar.</p>
<p>Aunque Flame no es exactamente un virus de computadora tradicional – sus creadores eran parte de una red de espionaje- muchas de sus características pueden ser copiadas por criminales de menor monta. Inclusive algunas empresas han contratado a hackers profesionales para hacerse de los secretos de su competencia. Los antivirus han hecho poco por neutralizar estas amenazas. Asistimos entonces a la muerte de un viejo sistema sin un único reemplazante en la mira. <br />
</p>
El fin de una era: adiós al antivirus
El software convencional ha perdido su poder de defensa contra ataques más sofisticados. Pero si la era del antivirus ha terminado, ¿existe hoy una tecnología superior para reemplazarlo?