La mayoría necesita cerca de 8 horas de sueño nocturno por día. Con siete horas de sueño muchos estudios muestran que disminuye el estado de alerta, el tiempo de reacción, concentración y capacidad para tomar decisiones. Esto puede perjudicar el funcionamiento en el trabajo o en la escuela.
La pérdida de sueño también está asociada con problemas de memoria, desórdenes metabólicos, enfermedades cardiovasculares, cáncer, obesidad y diabetes. Parecería un tanto exagerado. De todas maneras, aquí algunos consejos para evitar todas estas calamidades:
Ir a la cama todas las noches a la misma hora, incluso fines de semana. Se comprobará que resulta mucho más fácil dormirse y permanecer dormido.
No tener el televisor en el dormitorio. Conviene usar el dormitorio solo para dormir. Eso acostumbra al cerebro a asociar la cama solamente con el dormir.
Evite luces brillantes antes de ir a la cama. La luz puede afectar el reloj interno del cuerpo y dificultar el sueño.
Haga un poco de ejercicio. Además de los beneficios para la salud de los ejercicios físicos moderados, esto también puede ayudar al sueño. Pero si hace ejercicios, tratad de hacerlos algunas horas antes de la hora de dormir para permitir al cuerpo volver al estado de relajamiento.
Evite la cafeína varias horas antes de la cama. Además de ser un estimulante que ayuda a permanecer despierto, la cafeína puede interferir con las etapa profundas del sueño.
Evite el alcohol varias horas antes de la cama. Aunque el alcohol puede ayudar a dormirse, también interfiere con las etapas profundas del sueño y causa interrupción de sueño en el período de sueño nocturno.
Mantenga la hidratación del cuerpo. La deshidratación pone al cuerpo en estado de estrés y puede provocar inquietud. Sin embargo, no ingiera demasiados líquidos porque tendrá que ir al baño varias veces durante la noche.
Si usted no logra obtener una cantidad suficiente de sueño durante el principal período de sueño, que es la noche, una buena contramedida es dormirse una siesta de 20-25 minutos.