Finalmente aún no se despejó la incógnita de quien será el próximo presidente de los argentinos y cuáles serán concretamente las políticas que se llevaran adelante en materia de vivienda. Lo que esta claro es que la disputa queda circunscripta a una segunda vuelta de dos candidatos y por ende resulta imprescindible conocer el punto de partida de aquello que ellos plantean en su plataforma como medidas o políticas de vivienda.
La accesibilidad a la vivienda digna es un tema central para el progreso de una sociedad, algo que hoy resulta muy lejano para la gran mayoría de los argentinos que a partir de su ingreso saben lo imposible que resulta acceder a la casa propia
Resulta al menos saludable el reconocimiento de esta situación deficitaria que fue enarbolado como una de las principales banderas de campaña por todos los candidatos a presidente.
Ahora que la elección queda reducida a dos candidatos, y que a través de la opción que brindará el voto se definirá quien de ellos ostentará la máxima autoridad ejecutiva de la Nación, resulta aún más imprescindible conocer no sólo que propone cada uno sino como concretamente llevarán adelante cada una de esas promesas de campaña.
A continuación a modo de resumen destacamos los principales lineamientos que en materia de vivienda proponen Daniel Scioli y Mauricio Macri según Reporte Inmobiliario.
En estos menos de treinta días que nos separan del ballotage es previsible y deseable que los discursos generales den paso a mayores precisiones en cada una de las políticas propuestas para que la ciudadanía pueda tomar la decisión más y mejor informada
Daniel Scioli
Profundizar el plan PROCREAR, ampliando las líneas de crédito y dotando de nuevas fuentes de financiamiento al Plan PROCREAR. A las líneas actuales de crédito de construcción (con y sin terreno) y de ampliación y terminación, se sumarán dos líneas nuevas: compra de vivienda a estrenar en pozo (orientadas a la construcción de viviendas multifamiliares y edificios en altura en terrenos dentro del ejido urbano) y compra de vivienda usada con un complemento de crédito para refacción.
Exigir a los bancos privados que sean también alternativas para que los trabajadores y la clase media cuenten con créditos hipotecarios de largo plazo y a tasas accesibles.
Construir 250 mil viviendas anualmente, con un piso de 1 millón nuevas en cuatro años.
Reducir el déficit habitacional, a través de un plan integral de urbanización de villas/asentamientos en el país que promueva la integración socio-urbana y comunitaria a partir de un conjunto de herramientas de obra pública, normativas, fiscales, presupuestarias, financieras, de gestión y seguimiento y control.
Se otorgarán créditos hipotecarios blandos, con plazos y cuotas accesibles según el nivel de ingreso familiar de los nuevos propietarios de las viviendas. Todas las viviendas sociales serán adjudicadas mediante sorteos absolutamente transparentes realizados por Lotería Nacional.
Aplicar los principios de la Ley de Acceso justo al Hábitat de la Provincia de Buenos Aires a todo el territorio nacional. Así, se espera generar 100.000 lotes por año, con acceso a servicios y con escrituras, en todo el territorio nacional.
Poner en marcha la agenda para la vivienda social y para la generación de suelo urbano.
Mauricio Macri
Creditos hipotecarios: un millón de créditos hipotecarios a 30 años con fondos de la ANSES. La cuota mensual será parecida a la de un alquiler. Para una casa de un millón de pesos, por ejemplo, la cuota mensual va a ser de $3500. Es decir, el 4,3% del valor de la casa. El plan complementa a PROCREAR. Actualmente, PROCREAR presta a una tasa fija del 16%, que requiere un esfuerzo enorme a las familias en sus primeros años pero después se va licuando con la inflación.
Con el plan propuesto, la ANSES prestaría a una tasa del 0%, pero que se ajusta cada año según un índice a convenir, probablemente una combinación de inflación y salarios. Se asegura que se lanzará el 10 de diciembre, porque es urgente y no hay razón para esperar ni un día.
2. Escrituras para todos: lanzamiento de un programa de escrituras para la gente que tiene su casa pero no tiene la escritura oficial. Se calcula que hay casi un millón de familias en esta situación
Se relajarán las normas para darles las escrituras a esas familias y se propone llevar a los escribanos directamente a sus barrios, para que el trámite sea lo más fácil posible.
Se propone entregar 750.000 escrituras en cuatro años.
Urbanizar 100 villas y asentamientos por año durante dos períodos de gobierno, llegando a un total de 800 asentamientos, algo menos de la mitad de los que existen actualmente. Si en promedio hay 300 familias por asentamiento, cumpliendo esta meta se estaría beneficiando a 240.000 familias.
Finalizar las 208.379 viviendas prometidas (pero no terminadas) por el gobierno actual y construir 100.000 viviendas nuevas por año. Terminar las 127.018 remodelaciones y mejores en proceso actualmente.
Lanzar un nuevo programa de mejoras para brindar 170.000 soluciones en el lapso de un mandato.
