Pero nada de eso ocurre ahora. Estados Unidos está muy concentrado en reactivar su economía de modo firme, después de la crisis -la verdadera gran Depresión de 2008, no la de 1930- . Europa lucha por salvar el euro y toda la arquitectura de la eurozona. Japón no logra superar sus problemas y la política de quantitive easing (inyectar recursos líquidos en el mercado cada mes comprando bonos y títulos) que tan bien le sirvió a Washington, no les está funcionando y el estancamiento continúa.
¿Puede ser China la gran esperanza? De ninguna manera. El crecimiento se desacelera, hubo devaluación, caída bursátil y menor demanda de productos mundiales. Pero sobre todo, no tiene el menor interés de enfrentar el paquete que viene junto con convertirse en líder internacional en el campo económico y financiero.
Sobre todos estos temas centrales incursiona esta revisión del año que acaba de terminar:
Quién gana y quién pierde con un dólar fuerte
Petróleo: el que pestañea, pierde
El dólar, obsesión para todo el mundo
La batalla del Pacífico sigue por otros medios
La legendaria “Ruta de la Seda”, se reinventa
Grecia: pragmatismo y argumentos morales
Mitos y realidades tras el debate sobre guerra de divisas
Refugiados: vergüenza e improvisación en Europa
Las cinco megatendencias que impactarán en el futuro cercano
Perfil del jefe del Estado Islámico
China cuestiona la hegemonía de EE.UU.