Hewlett-Packard Enterprise decidió desprenderse de sus activos de software y fusionarlos con una pequeña empresa británica llamada Micro Focus. Así, el gigante norteamericano sigue achicándose y la startup hasta ahora casi desconocida, pasa a ocupar un lugar entre las grandes tecnológicas europeas.
Hewlett Packard parece haber acelerado la operación después de los resultados financieros del tercer trimestre. Las acciones de HPE cayeron 6 centavos a US$ 22,08 al conocerse la noticia.
Como parte del acuerdo Micro Focus pagará a Hewlett-Packard Enterprise US$ 3.500 millones y los accionistas de HPE recibirán una participación de 50,1 % en la nueva entidad.
La operación es un golazo para Micro Focus, que durante años fue una empresa mediana de tecnología empresarial que proveía programas antiguos a empresas grandes como supermercados y tiendas.
Este spin-off/fusión de los activos de software con Micro Focus significa que los activos de Autonomy, que fueron comprados por HP en 2011, vuelven a parar a manos británicas. Aquella fue una operación lamentable que dio origen a un litigio que aún no termina.