Se llamará la Serie W. Después de 70 años de carreras Fórmula Uno, sólo una mujer se anotó en un campeonato mundial y sólo dos se asnotaron en la Grand Prix.
Motorsport es un lugar en el que hombres y mujeres pueden competir en un pie de igualdad, pero después de la Segunda Guerra Mundial hubo una notable disminución en la participación femenina y, en consecuencia, de triunfos.
La nueva competencia está diseñada como una carrera de entrada libre en auto estandarizado. Tiene un fondo de premios de US$ 1,5 millones y pretende brindar a todas las competidoras seleccionadas la capacitación necesaria para la competencia de primera línea.
La noticia de la nueva serie tuvo una recepción de optimismo cauteloso entre las mujeres que ya están en la industria del motorsport. Les preocupa, sin embargo, la introducción de una competencia segregada como medio de fomentar el progreso.
“·Preferiría competir junto a los hombres en una carrera mixta”, dice Claire Williams, subdirectora del equipo Williams F1.
La Serie W es la última en una serie de iniciativas tendientes a aumentar la participación femenina en el motorsport.
