No es necesario que el N° 1 de una empresa sea un experto en tecnología.
Basta con que tenga un entendimiento de cómo puede usarla en provecho
de su organización. Requiere un fluido nivel de comunicación con
el responsable del área IT y también de éste con los responsables
de las unidades de negocio.
Consideremos brevemente estas tres circunstancias:
1- Según una reciente investigación de la consultora en comunicaciones
Burson-Marsteller, a pesar del creciente papel que juega la tecnología
en el éxito de una compañía, sólo 8% de las 500
compañías globales del ranking de Fortune dicen tener expertos
en tecnología –un director de Informática o director de
Tecnología– en sus juntas directivas. De los profesionales diestros
en tecnología que tienen presencia en la Junta Directiva, la mayoría
vienen de compañías cuya sede principal está en Norteamérica
o en la zona Asia Pacífico. Lo que revela la intensa competencia entre
las dos regiones en términos de innovación tecnológica.
2- La mayoría de los más encumbrados directivos en IT en Estados
Unidos están convencidos de que están alineando la estrategia
de IT con las necesidades de los negocios que atienden. Lo que supone –según
un trabajo de McKinsey– que cooperan con las áreas de negocio agregando
valor significativo, en vez de reaccionar únicamente ante las demandas
de ellas.
3- Durante la década pasada, se fortaleció la tendencia a centralizar
IT con recorte de costos y mejor cumplimiento de los estándares corporativos.
La parte negativa es que estos cambios a menudo han debilitado la comunicación
–y agrandado la distancia– entre la tecnología y el negocio.
Con lo cual el proceso de cooperación inevitable que se requiere ahora
es mucho más difícil.
Es una inquietud global. También ocurre en la Argentina. Así fue
como se concibió esta investigación especial de Mercado
que se despliega a lo largo de las próximas 14 páginas.
Todo el trabajo gira en torno a la tecnología y a su relación
con los negocios, pero en verdad es un verdadero ensayo sobre management.
Para dar una idea de la complejidad de este trabajo, baste decir que demandó
más de seis meses.
Como siempre ocurre, el punto de partida fue conceptualizar la inquietud periodística
de manera de plasmarla en una batería de preguntas, cuya respuesta satisficiera
el interrogante inicial.
Lo primero entonces fue encontrar al partner estratégico: el
que supiera cuáles eran los temas en danza y cuáles las preguntas
adecuadas. Así comenzaron las conversaciones con los directivos de Paradigma,
la prestigiosa consultora en management y tecnología informática,
verdaderamente especializada en el tema. Tras las conversaciones iniciales,
el comité ejecutivo de la firma decidió que uno de los socios,
Jorge O. Seoane fuera el responsable de encauzar la investigación conjunta
con Mercado.
Lo primero fue redactar una especie de guión/cuestionario sobre los temas
a someter a consideración de los entrevistados. ¿Qué es
lo que pretendíamos conocer y transmitir a nuestros lectores? Cuál
es el valor del aporte de IT a sus negocios, cómo ayuda a conocer las
expectativas de sus clientes y a diseñar estrategias para satisfacerlas.
Cuál es la interacción entre las distintas unidades de negocios,
gerencias de la empresa y proveedores. Determinar el posicionamiento de la gerencia
de sistemas dentro de la organización; precisar niveles de inversión
y costos; e indicar la estrategia de recursos, y de sistemas de información.
La siguiente dificultad fue aceptar que solamente podían contestar este
sondeo quienes realmente fueran los N° 1 de cada empresa.
Llevó largas semanas de contactos y gestiones, pero finalmente, se obtuvieron
respuestas completas en un sondeo minucioso en una muestra pequeña pero
muy representativa. El pormenorizado y extenso cuestionario fue contestado por
diez empresas que operan en distintos rubros: bancos, call centers,
servicios, instituciones educativas, salud, textiles y energía.
Había algo más que hacer. Demandar entrevistas personales para
ser publicadas con algunas personalidades que o bien fueran el máximo
nivel de conducción de la empresa, o en su defecto la bisagra entre el
sector IT y el N° 1 de la organización.
Así se plantearon tres clásicas entrevistas periodísticas
(Telecom, Banco Francés, Nestlé) en sectores de actividad económica
sustancialmente distintos, cada uno con su problemática específica.
Estas entrevistas fueron realizadas por la redacción de Mercado
con el inestimable aporte de consultores de Paradigma, que se ocuparon de mantener
su desarrollo en el rumbo correcto.
También la gente de Paradigma analizó las principales conclusiones
del sondeo, que se publican en las páginas que siguen.
Finalmente, Jorge O. Seoane, escribió el artículo final que cierra
este trabajo, con las reflexiones sobre las principales observaciones que dejó
esta laboriosa experiencia.
Pocas veces hemos abordado una investigación tan demandante. Pero creemos
que los resultados justifican totalmente el esfuerzo. Nuestro agradecimiento
a nuestros socios en esta aventura intelectual, Paradigma Sociedad de Soluciones
(www.paradigma.com). M