ElliQ, es un compañero de inteligencia artificial diseñado para personas mayores por la compañía de tecnología israelí Intuition Robotics. Es una suerte de Alexa : puede leer las noticias, transmitir música y compartir informes meteorológicos, según explica la consultora Trendsity.
Su valor diferencial frente a otras propuestas tecnológicas es la empatía: puede animar a las personas a tomar sus medicamentos, a practicar la meditación o simplemente hacer compañía: posee una paciencia amable y cuidadosa que ni Apple, ni Google tienen porque justamente priorizan al público general. Por ejemplo: no le dice a la persona “¿Te gustaría escuchar música?”, en cambio, propone “¿Te gustaría escuchar música juntos?’ ‘¿Quieres jugar un juego juntos?’, establece cercanía, acompañamiento y confianza.
Otro caso es línea de software GrandPad, cuyo objetivo es ofrecer una tableta simple sin ningún tipo de complejidades, viene precargado con bingo, solitario y sudoku. Puede reproducir música de décadas pasadas así como álbumes de fotos, libretas de direcciones y tiene funciones de videollamadas. Todo esto se presenta en pantalla con texto de gran tamaño y botones grandes de colores primarios. Un detalle: este dispositivo incluye un lápiz para interactuar con la pantalla dado que las personas más jóvenes tienen humedad en la piel y eso es lo que hace que las pantallas táctiles funcionen, no pasa así con los mayores.
Estos son sólo algunos ejemplos de tecnologías que realmente ponen a las personas mayores en el centro, pensando y diseñando propuestas alineadas a sus necesidades. Es decir, se trata de personas que pueden tener dispositivos pero posiblemente no sepan cómo usarlo de manera efectiva.
Hemos visto en nuestras investigaciones que se han amigado y acercado a las tecnologías forzados por la necesidad durante la cuarentena, de estar comunicados y realizar actividades o, hacer trámites o también por entretenimiento pero esto no significa que no necesiten asistencia para optimizar su funcionamiento. De hecho, han sido víctima de fraudes y estafas. Todo el proceso de ideación y diseño es clave para que los adultos mayores utilicen mejor las posibilidades tecnológicas e incluso, sean menos vulnerables.